La pesadilla de Christina Urrego terminó.
Esta mujer logró recuperar en los últimos días una finca, ocho años después de que le fuese arrebatada por un hombre que primero la había tomado en arriendo y luego terminó quedándose con ella tras intimidar y amenazar a Urrego. La propiedad está ubicada en una vereda llamada Santa Helena, en el Meta.
La Unidad de Restitución de Tierras informó que el drama de Urrego* empezó en el 2009, cuando tras quedar viuda y ver difícil continuar sola con la administración de la producción agrícola y ganadera que se realizaba en el terreno de 327 hectáreas, decidió darla en arriendo verbal a un hombre durante un año.
"Transcurrido el tiempo pactado, Cristina regresó al lugar, y encontró para su sorpresa que las casas de habitación, los corrales y la pesebrera habían sido destruidos, porque allí se halló un pozo petrolero para cuya explotación Ecopetrol adelantaba trabajos en medio de negociaciones con el supuesto dueño, simple arrendatario", detalló la información de la Unidad.
"Conocida la real propiedad del terreno -añade el reporte-, la empresa de hidrocarburos se abstuvo del negocio. Fue entonces cuando el hombre formuló sin éxito ofertas de compra a Cristina por la tierra, pero ella desde un principio se mostró renuente de llevar a cabo el negocio".
Entre las razones que tuvo Urrego para rechazar la propuesta estuvo que conoció, por medios de comunicación, que el hombre a quien le había arrendado y se hizo pasar por dueño del predio para que se iniciara la mencionada explotación petrolera, integraba la Lista Clinton y era testaferro de los narcotraficantes alias Loco Barrera y 'Cuchillo'.
Tras conocer esto, ella y su familia fueron víctimas de una serie de amenazas para obligarla a renunciar a su propiedad.
"A tal punto llegaron las artimañas usadas por el victimario y sus hombres para que Cristina abandonara el predio, que hacia el año 2012, residiendo ya en el extranjero para intentar garantizar su seguridad, se instauró de manera sorpresiva contra ella una querella policiva por perturbación a la posesión, de la cual, ante su incredulidad, resultó finalmente despojada, pasando desde entonces el terreno a manos de quien la asediaba valiéndose además de autoridades fraudulentas de la región en ese periodo", señala el documento de la Unidad de Restitución.
Urrego, quien es madre de dos niñas, nunca dejó de luchar y pudo desenmascarar a su agresor.
"Pese a las afirmaciones del opositor –detalla la Unidad de Restitución–, quien mediante su defensa manifestaba haber pagado a la solicitante por el predio una millonaria suma más un apartamento, esta persona no pudo demostrar estos hechos. Por el contrario, el proceso dejó a la luz que dicho inmueble fue adquirido por él sin documentación y de manos de Diego Rodolfo y Jacinto Baez Baez, hermanos sujetos de extradición a los Estados Unidos por comprobarse su participación en actividades de narcotráfico".
El fallo que le devolvió el predio a Urrego señala también que el supuesto comprador tenía la capacidad para intimidarla y amenazarla. Tras la decisión, Urrego pudo regresar al país procedente de Estados Unidos.
ELTIEMPO.COM
*Nombre cambiado.