La primera noticia de los panini aparece en un libro de cocina italiana del siglo XVI, luego se volvieron populares en los bares de Milán, llamados paninoteche (paninotecas), en los años 1970 y 1980. La palabra viene de panino, que en italiano significa “bollo de pan pequeño”.
En los 70, los restaurantes estadounidenses de moda, especialmente los neoyorquinos, comenzaron a ofrecer paninis, y su popularidad se extendió a otras ciudades. Hoy se conocen en todo el mundo.
Es una especie de sándwich que se prepara con un pan que se corta horizontalmente y se rellena con salami, jamón, queso, mortadela y algunos vegetales; generalmente se sirve caliente.
Los originales están casi siempre rellenos de prosciutto y unas rebanadas de queso. En el centro de Italia existe una versión popular de panini, que está relleno de porchetta, es decir, trozos de carne de cerdo asada.
A la hora de prepararlo es clave el pan que se use, preferiblemente debe ser pan italiano, como la ciabatta o la focaccia, pero puede hacerse con cualquier tipo de pan.
La manera más fácil de hacerlo es partir el pan por la mitad, untarlo con aceite de oliva (poquito para que no se entrape), ponerle el queso, preferiblemente una tajada en cada pan, jamón serrano o cualquier carne. Al cerrarlo se unta mantequilla en la parte exterior del pan y a la sandwichera para paninis, que los deja tostados, como si hubieran estado en la parrilla.
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