Dos patrulleras de la Policía atendieron el parto de una joven que no alcanzó a llegar el centro asistencial del municipio de Calarcá, en Quindío.
Las patrulleras Heidy Amado y Sandra Ladino cambiaron por unos minutos sus labores diarias para atender a Karol Dahiana Benites, quien dio a luz a un bebé de 2,6 kilogramos de peso.
Amado y Ladino respondieron una solicitud de una madre que pedía ayuda para su hija embarazada, en el barrio Cacique, de esa localidad, pero al ingresar a la vivienda notaron que presentaba numerosas contracciones y los fuertes dolores le impedían moverse de la cama.
La patrullera Amado solicitó unos guantes para asistirla mientras llegaba la ambulancia, pero tuvo que atender el nacimiento. Después, paramédicos llegaron al lugar y cortaron el cordón umbilical al pequeño.
El comandante de Policía de Quindío, coronel Ricardo Suárez, felicitó a las patrulleras y dijo que la institución “cuenta con una gran calidad humana en su personal y que una vez más se enorgullece de que cumplan con su deber”.
“La mamá está agradecida con nosotras, pues cumplimos con nuestra labor, que es ayudar (...). Fue una situación de muchos nervios, se siente de todo, pero ya nació, está bien y es un hermoso niño”, contó la patrullera Amado.
Hace menos de un mes, dos patrulleros atendieron otro nacimiento en este municipio. Mientras trasladaban a una mujer al hospital, el parto se precipitó dentro del vehículo de la Policía y Jorge Hernando Tobón y Cristian Camilo Cadena ayudaron en el procedimiento. La bebé, a la que llamaron Sara, logró llegar a salvo al hospital La Misericordia.
ARMENIA