A la mamá de Édgar Guillermo Vallejo Guarín, ‘Beto Gitano’, le decomisaron el jueves pasado la casa que su hijo le había entregado con dineros provenientes del narcotráfico.
La vivienda es uno de los 13 bienes del capo, algunos a nombres de testaferros, que pasarán a manos de la Sociedad de Activos Especiales (SAE) para extinción de dominio, a raíz de operativos simultáneos ayer en el Eje Cafetero y Bogotá. Su valor estimado es de unos 6.000 millones de pesos.
“Son viviendas que las personas que las habitan no tienen cómo demostrar el origen de los recursos”, explicó el comandante encargado de la Policía Metropolitana de Manizales, Carlos Alberto Morán, tras anunciar los resultados.
Vallejo, de 57 años, inició su carrera criminal a finales de los ochenta con Pablo Escobar. Tras la muerte del jefe del Cartel de Medellín, en 1993, fue ascendiendo en el negocio a la par de otros narcotraficantes de su generación, como ‘Los Mellizos’.
Ya en este siglo, llegó a estar entre los seis narcotraficantes más buscados entre Colombia y Estados Unidos hasta su captura en España, en septiembre de 2008, y posterior extradición al país norteamericano.