Cerrar
Cerrar
'Nochadas', las fiestas que escandalizan a los barranquilleros

'Nochadas', las fiestas que escandalizan a los barranquilleros

Son convocadas por internet, asisten menores de entre 12 y 17 años. Confluyen sexo, licor y drogas.

18 de febrero 2017 , 09:00 p. m.

Manillas fluorescentes –verdes para ellos y fucsia para ellas– ayudan a que en la oscuridad de una casa desocupada, en la que imperan la música estridente y el olor a marihuana, se identifique de qué sexo son los menores y adolescentes que participan en las ‘nochadas’, las fiestas ilegales que se han popularizado en Barranquilla y su área metropolitana, y que preocupan a las autoridades.

“Son encuentros en los que hemos visto cosas aberrantes, como orgías, consumo desenfrenado de licor y todo tipo de drogas”, así las describió sin titubeos el comandante de la Policía Metropolitana de la ciudad, general Mariano Botero.

El oficial, quien ha estado al frente de los operativos de los últimos 15 días –en el más reciente, en el barrio Ferrocarril de Soledad (Atlántico), fueron retenidos 113 menores y 38 adultos–, asegura que en su poder están los videos que evidencian este tipo de conductas de niños entre 12 y 17 años. Pero, advierte, son imágenes que no se pueden divulgar.

La teniente Jeimy Vargas, jefe del grupo de Infancia y Adolescencia de la Policía Metropolitana, narró a EL TIEMPO que varios de los menores retenidos en estos encuentros, y que han sido entrevistados posteriormente, han admitido que en estas fiestas se dan dinámicas en las que los obligan a interactuar obscenamente con personas del mismo sexo.

“Ellos (los niños) nos dicen que por dinero comienzan a hacer cosas como besar a otro muchacho, como si se tratara de un reto. El resto de la evidencia que tiene la Policía es usada dentro de la investigación”, anotó la oficial.

Las ‘nochadas’ no son reuniones que comenzaron a darse en la capital del Atlántico de la noche a la mañana. Para el expersonero Arturo García, quien lleva varios años investigando los patrones y el fondo de los hechos criminales en la ciudad, estas son las mismas fiestas que antes eran conocidas como ‘tardeadas’, solo que ahora esos mismos niños que las frecuentaban han crecido, al igual que sus ganas de disfrutar con mayores excesos.

García ha alertado a la Policía con información que ha servido para que se realicen los operativos de los últimos días, como el primero en el que se lograron frenar dos de estas fiestas: una, en la carrera 9J con calle 86-53, barrio Evaristo Sourdis, y otra, en la diagonal 86 con la 9H-10, barrio Los Rosales, ambas en el suroccidente de Barranquilla. “Ese día vimos a más de 200 jóvenes corriendo de un lado a otro cuando llegamos con la Policía. Olía a ‘cripy’ (cigarrillo en el que se combinan coca y marihuana) y los muchachos se echaban gotas en los ojos, antidepresivos que con el licor los excitan”, contó García.

‘Pandillas están detrás’

El líder cívico sostiene, con base en varios estudios de su autoría, que detrás de las también conocidas como ‘fiestas estilo porno’ están los líderes de subgrupos que han nacido de las pandillas y grupos delincuenciales de barrios del suroccidente y suroriente de la ciudad, y de Soledad, que por su ubicación sirve de acopio para atraer niños y jóvenes del área metropolitana, de poblaciones como Malambo y Galapa.

“Le he seguido la pista a este fenómeno y lo he visto evolucionar, y he constatado cómo se gestó una gran red de jóvenes al servicio de la degradación de valores y con gran simpatía por lo ilegal, que le hace apología a la delincuencia. Estas fiestas hacen parte de la iniciación de muchos de los miembros de estos subgrupos, que, calculo, en Barranquilla ya ascienden a los 110 y en Soledad a 92; pero ojo, no de pandillas o tribus urbanas, sino ramificaciones de estas”, dice.

García añade que haciendo seguimiento de campo y a través de redes sociales ha visto a muchos de estos jóvenes crecer en células de pandillas y con el tiempo han madurado hasta el punto de ser quienes convocan las ‘nochadas’, de ahí que los adultos capturados en los operativos de la Policía no superen los 22 años.

“No es solo la fiesta la que debe preocuparnos, sino el patrón de simpatía y convocatoria que estos grupos o líderes negativos están teniendo en la población infantil. Por esto estamos viendo cómo cada vez son más los jóvenes que vienen siendo sorprendidos en actos ilegales, como el sicariato y la venta de estupefacientes. Así mismo, cómo se incrementan los embarazos en la población joven de la ciudad”, advierte el expersonero.

El poder de las redes

‘Gran Party al Stylo Casa Porno con the farandulays’, dice un evento que se puede encontrar en Facebook y que convoca a otra ‘nochada’ en Barranquilla, una de las siete detectadas que se realizarían en los próximos días, y sobre las que las autoridades trabajan para poder neutralizar.

Y son las redes sociales las que se encargan de mantener activas las convocatorias, las cuales, en un principio, son citadas en puntos estratégicos de la ciudad, donde luego son recogidos los jóvenes para ser llevados a la casa donde se realiza la fiesta, cuya hora de finalización se fija para la tarde del día siguiente.

“Habrá condones de colores para los primeros 100 asistentes”, “Trae tus mejores posiciones porque lo que habrá es sexo” y “No te pierdas de la presencia de una actriz porno” son algunos de los mensajes que se leen en la página, donde también están los lugares y los horarios en los que se recogerán a los invitados.

El general Botero explicó que estas fiestas se organizan en lugares desocupados y que son adaptados para darle rienda suelta a todo tipo de conductas obscenas.

Botero describió que en una mesa principal dispuesta en la casa es posible encontrar un coctel de sustancias alucinógenas, por las que los asistentes deben pagar un precio extra al de la entrada que oscila entre los 5.000 y 20.000 pesos.

“Sabemos que abren un grupo de chat en WhatsApp y allí van transmitiendo las generalidades de las fiestas y se sigue invitando a más personas. Una vez llegamos y vimos cómo estas casas son dotadas de colchones y de cuartos vacíos”, precisó el oficial.

Aclaró que las investigaciones sobre otras fiestas que se están organizando van en paralelo con el interés de descubrir a las personas u organizaciones que estén detrás de estos eventos y poder suspenderlas a tiempo.

“Puedo decir que lo que ahí se hace es aberrante y por eso vamos a estar muy pendientes. El número de hombres en las fiestas es de 60 por ciento, y de mujeres, 40, pero lo que más nos preocupa es el poco interés de los padres por sus hijos. Esto queda en evidencia –reveló el general Botero– con la situación que se presentó el pasado domingo. A las 4 de la tarde, todavía no habían sido recogidos 40 menores en la UPJ”.

BARRANQUILLA

Llegaste al límite de contenidos del mes

Disfruta al máximo el contenido de EL TIEMPO DIGITAL de forma ilimitada. ¡Suscríbete ya!

Si ya eres suscriptor del impreso

actívate

* COP $900 / mes durante los dos primeros meses

Sabemos que te gusta estar siempre informado.

Crea una cuenta y podrás disfrutar de:

  • Acceso a boletines con las mejores noticias de actualidad.
  • Comentar las noticias que te interesan.
  • Guardar tus artículos favoritos.

Crea una cuenta y podrás disfrutar nuestro contenido desde cualquier dispositivo.