Dos semanas después de haberse implementado un nuevo esquema de pico y placa en la ciudad de Bucaramanga, en Santander, el malestar sigue reinando entre los comerciantes de la zona centro de esa capital, donde se estipuló la restricción de la movilidad de vehículos, carros y motos, en cinco dígitos (0, 2, 4, 6 y 8 en días pares y 1, 3, 5, 7 y 9 en fechas impares).
Centenares de dueños de negocios en ese sector decidieron cerrar las puertas de sus establecimientos y lanzarse nuevamente a las calles para exigir la revocatoria de la norma, que se aplica entre las carreras 9 y 19, y las calles 33 y 45. Aseguran afecta el desempeño de su actividad.
Según reportes de Fenalco, la medida ha generado pérdidas económicas en el comercio que alcanzan el 60 por ciento.
"Pedimos modificar la medida porque está acabando con nosotros, especialmente del edificio Plaza Central. Esperamos que el Alcalde nos dé la mejor solución para esto, nosotros no somos vándalos, pero nos vemos abocados a salir a marchar", dijo Graciela Gonzáles, una comerciante.
Los manifestantes piden que se vuelva implementar el esquema de pico y placa que se tenía el año pasado, que restringía la movilidad de vehículos solo para dos dígitos.
Unos cambios, que en días pasados la Alcaldía le efectuó al nuevo esquema de pico y placa en la zona centro de esa capital, no logró calmar los ánimos de rechazo entre los comerciantes, quienes decidieron movilizarse una vez más para pedir derogar la medida.
A las cuatro de la tarde de este lunes, el alcalde de Bucaramanga, Rodolfo Hernández, se reunirá con los representantes de los comerciantes para escuchar sus argumentos y tomar una decisión final.
BUCARAMANGA