Desde ocho puntos claves ubicados en las zonas altas de edificios y en sitios estratégicos sobre los cerros orientales, vigías de la Defensa Civil (DC) con potentes binoculares monitorean la zona forestal para alertar y evitar la propagación de incendios forestales.
Por su parte, el Batallón de Logística del Ejército dispuso soldados para la vigilancia y control del sector centro oriental, pues por ese sitio se iniciaron hace un año los incendios que afectaron toda la ciudad.
Este es parte del Plan Distrital de Contingencia del Instituto de Gestión del Riesgo (Idiger) por incidentes forestales, el cual fue dado a conocer este jueves y que incluye a 32 socorristas que recorren la zona montañosa con el fin de prevenir quemas en esa reserva forestal.
Richard Vargas, director del Idiger, dijo que también se retoman las acciones del año pasado. Esto es tumbar el retamo espinoso para evitar la propagación del fuego, el mantenimiento de los caminos de acceso a la parte alta de la montaña (que también actúan como cortafuegos) y entregar el equipamiento y la capacitación al personal con el fin de operar de forma coordinada con los grupos de Bomberos, la misma DC y el Ejército.
(Además: Usar drones para controlar incendios)
En este sentido, aseguró que el grupo de incendios forestales de los Bomberos y cuatro brigadas de DC están de forma permanente en los cerros, de domingo a domingo y desde el sur hasta el norte de la ciudad, revisando y controlando posibles quemas o conatos de incendios en los cerros.
Añadió que en el Centro Distrital de Logística y Reserva están listos todos los equipos necesarios para hacer frente a una emergencia. También hay recursos para financiar el ataque aéreo en caso de ser necesario. Sobre las lluvias permanentes que han caído en los últimos días en la ciudad, Miroan Sverko, meteorólogo del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam), dijo que por ahora la nubosidad que se ha presentado sobre la capital ha mitigado el impacto del tiempo seco que caracteriza el mes de enero.
BOGOTÁ