La Fiscalía archivó la indagación que abrió en 2014 contra el excandidato presidencial del Centro Democrático, Óscar Iván Zuluaga, en relación con las actividades ilegales que realizó el hacker Andrés Fernando Sepúlveda.
La decisión fue cerrar ese proceso, “frente a la inexistencia de motivos o circunstancias fácticas que permitan siquiera inferir en forma razonable que el actuar de Zuluaga pueda revestir en la característica de delito”.
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“No se le puede atribuir a Zuluaga la contratación de Sepúlveda y menos aún alguna orden o mandato al margen de la ley”, dice la determinación, que fue recibida por el excandidato como la demostración de que hubo “una infiltración criminal” contra su aspiración a la Presidencia en el 2014.
“Esto confirma lo que siempre hemos dicho: que nuestra campaña fue honorable y atenida a la ley”, dijo. Y aseguró que hubo una persecución política contra el uribismo por la Fiscalía en tiempos de Eduardo Montealegre.
Al archivar el proceso contra el político, la actual administración de la Fiscalía decidió proseguir la investigación en contra de su hijo, David Zuluaga, quien fue gerente de la campaña. También sigue adelante el caso contra Luis Alfonso Hoyos, ‘asesor espiritual’ del Centro Democrático.
Cuestionamientos
Tras diez condenas por el caso del hacker, empezando por el propio Sepúlveda, la Fiscalía dice que hasta ahora no existe ningún indicio de infiltración contra la campaña del Centro Democrático. “Se logró establecer que Sepúlveda, en los primeros días del 2014 en Bogotá, se reunió al parecer con el asesor de la campaña con el fin de concertarse para la lograr la terminación o el desprestigio del proceso de paz mediante la obtención de información secreta o privilegiada, información recaudada mediante la realización de variadas actividades delictivas”.
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Según el documento que cierra el caso del candidato, de la investigación adelantada y de la información suministrada por Sepúlveda “se logró determinar, más allá de toda duda razonable, la existencia de hechos delictivos al interior de la oficina que este dirigía”.
La investigación cuestiona la contratación de Sepúlveda para una supuesta asesoría en el manejo de redes y blindaje informático. A pesar de que otras empresas fueron contratadas con el mismo objeto, en el caso del hacker no existió documento alguno, aunque le pagaron 230 millones de pesos.
Esa plata no fue reportada en los gastos electorales y, por lo tanto, la Fiscalía informó al Consejo Nacional Electoral esta situación, para que inicie su propia investigación. “La forma de contrato que se utilizó con el señor Sepúlveda no fue diáfana”, dice el organismo.
En relación con la famosa reunión de Sepúlveda con el candidato, la Fiscalía dice que el video “fue analizado por FBI, demostrándose su autenticidad”. “En ese coloquio grabado, el señor Sepúlveda está manifestando abiertamente que tiene acceso a información de inteligencia, lo que claramente evidencia que este ciudadano está cometiendo una actividad delictiva (...) No se observa que el señor Óscar Iván Zuluaga se inmutara ante esta situación”, cuestiona.
Este es el documento de la Fiscalía sobre Óscar Iván Zuluaga: http://www.fiscalia.gov.co/colombia/wp-content/uploads/20170111.pdf
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