A pocos metros del lugar donde un tractocamión se quedó sin frenos y embistió a 23 vehículos, cientos de habitantes de San Gil (Santander) marchan este viernes para exigirle al Gobierno nacional la construcción de una vía alterna de 10,5 kilómetros, que evite tragedias como la que este jueves ocasionó estragos en una zona de alta afluencia de turistas. (Lea aquí detalles del accidente).
Vestidos de blanco, con una expresión de tristeza en el rostro por la reciente fatalidad, estos santandereanos elevan un clamor que no es nuevo. El suceso los obligó a ‘desempolvar’ de sus recuerdos un accidente automovilístico de proporciones similares, ocurrido 30 años atrás, que arrebató la vida de una familia compuesta por siete integrantes.
Según el alcalde de San Gil, Ariel Fernando Rojas, el proyecto por el que los habitantes de su municipio salieron a marchar cuenta con los estudios técnicos que avalarían su aprobación, pero no ha merecido la suficiente atención por parte del Ejecutivo.
“Desde hace más de 20 años se ha venido solicitando la variante para el municipio. Nuestra ciudad ha venido creciendo en los últimos años y más siendo la capital turística de Santander. La vía nacional que divide nuestro municipio solo tiene un paso vehicular, por tal razón, esta nueva calzada ya fue trazada y estudiada en otras oportunidades. Le pedimos hoy al Gobierno que incluya la variante en el próximo concesionario, que se va adjudicar en mitad de año, para que le demos una solución definitiva a esta tragedia”, manifestó el funcionario.
En los planos se contempla que la variante arranque en la entrada del municipio de Pinchote (Santander) y concluya a la altura del kilómetro 5 de la vía Bucaramanga – San Gil, en un sector denominado Palo Blanca.
Este corredor aliviaría el flujo vehicular de 3.000 automotores que a diario tienen que atravesar el municipio, tomar el puente del Río Fonce y continuar por este corredor que comunica el oriente del país con Bogotá.
La movilización en honor a las víctimas inició en el sector conocido como Pozo Azul y finalizará en el Parque Gallineral. A pocos metros de allí, el vehículo pesado emprendió su trágica marcha, embistiendo 16 carros y 7 motocicletas, hasta impactar la fachada de un hotel y dos oficinas de turismo donde produjo una explosión.
De las 17 personas lesionadas en medio de la colisión, siete ya fueron dados de alta y dos se encuentran en cuidados intensivos.
Como medida preventida, la Policía de Santander anunció que durante el fin de semana habilitará una carretera del municipio de San Gil para desviar los vehículos pequeños que transitarán en el plan retorno.
BUCARAMANGA