Si los acuerdos políticos se cumplen y la coalición mayoritaria se mantiene unida, el próximo presidente del Concejo sería del Partido Liberal. Y aunque virtualmente el opcionado es Horacio José Serpa Moncada, en las toldas rojas hay diferentes fuerzas que pueden inclinar la balanza.
Allí están los recién llegados Germán García Maya (hijo del exconcejal Germán García Zacipa) o Luz Marina Gordillo (esposa del exconcejal Darío Fernando Cepeda, de Cambio Radical); Armando Gutiérrez, de quien se dice heredó parte de los votos del exconcejal liberal Jorge Ernesto Salamanca, condenado por el ‘carrusel’ de la contratación.
Los otros dos son viejas figuras de la política liberal en Bogotá: María Victoria Vargas Silva y Jorge Durán Silva, curtidos concejales que pueden tener en sus manos la decisión de cuál será el candidato rojo.
Como sucedió en el 2016, en esa pelea la coalición no se va a meter por varias razones. La primera, porque la próxima presidencia del 2018 es para el Centro Democrático y de por medio está la elección presidencial y no va entrar a dividir. Lo mismo la Alianza Verde que le corresponde la del 2019.
De Serpa Moncada se rumoró que de golpe tendría aspiraciones al Congreso. Significaría su retiro de la presidencia a medio camino y en consecuencia subiría el vicepresidente que por ley le corresponde a la oposición donde podría repetir Hollman Morris. De ahí que nada esté decidido.
En las comisiones la situación quedaría así: plan pasa para la Alianza Verde; Gobierno para los conservadores y Hacienda para Cambio Radical.
Este año es clave para la Administración temas como Plan de Ordenamiento Territorial (POT), el Código de Convivencia Ciudadana y la aprobación de las vigencias futuras para apalancar el metro elevado.