En el 2016, las movidas empresariales no se afectaron de manera importante por la desaceleración económica.
Sobresalieron las ventas de activos públicos como Isagén, la expansión de las multilatinas del Grupo Empresarial Antioqueño (GEA) –el conglomerado más grande del país– y compradores como el fondo canadiense Brookfield.
La medición de EL TIEMPO indica que las 14 operaciones más grandes sumaron 22,4 billones de pesos (7.500 millones de dólares).
En el 2015 habían sumado solo 4.005 millones de dólares, aunque se sintió con más fuerza el desplome de los precios del petróleo y el carbón en la economía. (Lea también: Con nuevas movidas, empresas harán crecer su facturación y negocios)
Las estadísticas de la Superintendencia de Industria y Comercio (SIC) revelan, entre tanto, que en el 2015 se autorizaron 124 integraciones empresariales y en los 11 primeros meses de este año, 103. No obstante, las del 2016 fueron de mayor cuantía que las del 2015.
Y es que si bien la mitad de los 22 billones de pesos en grandes movidas empresariales este año correspondieron a la venta de la generadora Isagén, a Brookfield, activos como aerolíneas, aseguradoras, cadenas de pizzerías, cementeras, petroleras, firmas de tecnología y centrales de información cambiaron de dueño.
Además, hubo reacomodos hasta los últimos días del año: ISA entró el miércoles, con 968.000 millones de pesos, como socio de la eléctrica Taesa en Brasil, y el Grupo Argos elevó de 55 a 99 por ciento la participación en la concesionaria Odinsa, al pagar 816.000 millones de pesos. Por su lado, Ecopetrol dijo este viernes que recolectó un billón de pesos por la venta del 6,3 por ciento de EEB.
El hecho de no contar con participación en las juntas directivas, pues tenían pequeñas representaciones, o debido a que los títulos no se encontraban en el foco de sus negocios, fue una de las causas por las que esa y otras empresas decidieron vender. Ecopetrol también enajenó recientemente su 5,32 por ciento en ISA, por 513.400 millones de pesos, buscando realizar desinversiones en activos no estratégicos y sumar efectivo para paliar la baja de los precios del crudo.
En el exterior, por 108.000 millones de dólares, la belgobrasileña AB InBev compró a la sudafricana SABMiller, la dueña de Bavaria, y se hizo con un 99 por ciento del negocio cervecero en Colombia. Por ello se integraron, entre otras firmas, Bavaria, Bogotá Beer Company (BBC), Cervunión y Cervecería del Valle. Dicha movida tuvo un estimativo para el caso de Colombia, de 14.800 millones de dólares, pero no hubo intercambio de efectivo, pues se consolidó en Bélgica. (Además: Franceses llegan a negocio de lavanderías para hospitales en el país)
El director de la banca de inversión Inverlink, Mauricio Saldarriaga, afirmó que la venta de Isagén es la segunda transacción más grande en la historia del país tras la venta de Bavaria en el 2005, por 7.800 millones de dólares, a SABMiller, y en la que sí circuló efectivo.
Por su parte, la presidenta de Silk Banca de Inversión, Martha Juliana Silva, afirma que aunque hubo mucha expectativa luego del impacto del ‘No’ en el plebiscito, pues se daba por descontado el triunfo del ‘Sí’, y se temió un fuerte impacto sobre los negocios, y con eso el 2016 fue positivo para las fusiones y adquisiciones.
Los mayores protagonistas en el 2016 de las movidas, por el lado de los vendedores, fueron la Nación, con e Isagén, y, por el de los compradores, el Grupo Empresarial Antioqueño (GEA), que se hizo con cementeras en EE. UU. y con las operaciones de Royal Sun Alliance en Latinoamérica, elevó su participación accionaria en Odinsa y –a través del Grupo Bancolombia– adquirió el 49 por ciento del fideicomiso dueño de Viva Malls (matriz de centros comerciales).
ROLANDO LOZANO GARZÓN
Redacción Economía y Negocios