La orden de demolición del predio El Bambú, de propiedad de comercializadora Kaysser, por afectar la zona de reserva forestal en los cerros orientales, es la primera sanción de otras ocho que se está analizando y estudiando en la Corporación Autónoma Regional (CAR).
En la mira hay al menos cuatro megamansiones construidas, presuntamente, de forma ilegal en esa reserva ambiental.
El director de la CAR, Néstor Franco, dijo que en el 2017 se van a tomar varias decisiones de forma progresiva, a medida que avanza cada uno de los procesos que se adelantan en esa zona, a la altura de la calle 76 arriba de la carrera 2.ª este. Entre los procesos aparecen predios conocidos como Monterrodro, Arrayán, El Pauche y El Tuno.
La CAR dejó en claro que las decisiones se tomarán de acuerdo con la realidad de cada caso, y que pueden ser diferentes a la demolición. (Lea también: Cierran obras de lujosas mansiones que amenazan los cerros orientales)
En El Bambú, la CAR le impuso cuatro cargos por daño a la reserva, gracias a los análisis técnicos y jurídicos que realizaron, por lo menos, 25 expertos en diferentes disciplinas, entre ellos de las ciencias ambientales y abogados especializados.
Además de imponer la demolición por su propia cuenta, deberá presentar un cronograma y, una vez aprobado, tiene un plazo máximo en cinco meses para cumplir la orden.
Pero además se le impuso una multa de 463 millones de pesos por los daños que le causó a la reserva forestal.
Otra de las medidas que deberá cumplir la firma Kaysser es la compensación forestal que significa la siembra de especies en un área de 11.372 metros cuadrados, que fue la que se destruyó con la construcción ilegal.
Franco dijo que la sentencia del 2013 del Consejo de Estado protegió los cerros y que esta decisión de la CAR es un mensaje para aquellos que tienen algún tipo de interés sobre los cerros. Insistió, entonces, en que la reserva forestal tiene amparo judicial y no está permitida la construcción.
BOGOTÁ