Cita: “El director y productor de música salsa, Fruko, escribe en torno a la paz”.
Comentario: Fruko no es el único director y productor de música salsa. Por eso “Fruko” no debe ir entre comas.
Cabe recordar que los incisos que van entre comas repiten, “Ecopetrol, Empresa Colombiana de Petróleos, anunció aumentos”, o explican, “Los jurados, todos ellos cantantes, exaltaron el trabajo de las quinceañeras”.
Y se pueden quitar sin afectar el significado esencial, “Ecopetrol anunció aumentos”, “Los jurados exaltaron el trabajo de las quinceañeras”.
Si se hace lo mismo con la frase citada, quedaría “El director y productor de música salsa escribe en torno a la paz”, a lo que el lector preguntaría: ¿cuál? La frase de Fruko, pues, va sin comas.
Es importante distinguir entre modificador determinativo o esencial, “El negociador por el Gobierno Humberto de la Calle viajó a Oslo”, sin inciso y sin comas, porque no es el único negociador por el Gobierno, y modificador explicativo o accidental (no esencial), “El jefe del equipo negociador del Gobierno en La Habana, Humberto de la Calle, viajó a Oslo”, con inciso entre comas, porque es el único jefe de ese equipo.
Esta diferencia resulta fundamental por su significado en casos como: “Es necesario lavar las ventanas que dan a la 26” (solo las que dan a la 26; las demás no) y “Es necesario lavar las ventanas, que dan a la 26” (los otros costados no tienen ventanas); “Mariela y su hija, Magda, se inscribieron” (Magda es la única hija de Mariela) y “Mariela y su hija Magda se inscribieron” (Mariela tiene al menos otra hija).
Dequefobia
Cita: “¿Se siente optimista o pesimista frente a la posibilidad, que Colombia logre construir la paz?” (Datexco).
Comentario: la preposición “de” no se reemplaza con coma. La forma correcta es “… frente a la posibilidad de que Colombia logre construir la paz”.
En este, como en casos similares, la preposición “de” debe ir después del sustantivo, “El hecho de que no haya venido…”, “La esperanza de que regrese…”.
Nadie escribiría sin “de”, “El hecho no haber venido”, “La esperanza su regreso”, y para el caso citado, “frente a la posibilidad lograr la paz”.
No escribir “de” antes de “que” cuando debe hacerse constituye el error llamado “queísmo” (o “dequefobia”), en el que se suele caer por temor al “dequeísmo”, consistente en cambio en escribir “de que” cuando no debe ir la preposición “de” (“Dijo de que estaba satisfecha”, donde sobra “de”).
Fernando Ávila
Experto en redacción y creación literaria.
