Es común que por esta época en la que se disputan instancias finales del campeonato local de fútbol profesional surja una polémica tras otra, al punto de que terminan insertándose en la agenda noticiosa sin generar mayor revuelo. La más reciente, sin embargo, hay que destacarla porque no tiene antecedentes y porque poco ayuda a la imagen de la competición.
Se trata de la controversia entre el presidente de la Dimayor, Jorge Perdomo, y el director técnico de Atlético Nacional, Reinaldo Rueda, sobre las razones por las que el equipo verde terminó disputando su partido de semifinales contra Santa Fe con un onceno juvenil, dado su compromiso en Japón, donde esta semana comenzará el Mundial de Clubes de la Fifa.
Mientras Perdomo le declaró a este diario que a los verdolagas se les ofreció modificar el calendario para que pudieran participar con sus mejores hombres en todas las instancias y que su presidente, Juan Carlos de la Cuesta, aseguró que no era necesario, Rueda criticó este lunes a la Dimayor, según él, por una falta de apoyo, que se tradujo en una supuesta negativa de los rectores del fútbol para ajustar la programación de la Liga Águila, con tal de evitar el escenario que finalmente se dio el domingo. Partido que terminó con victoria 0-4 del cuadro rojo, que hizo lo que le correspondía: mostrar en la cancha total entrega.
Que un equipo, y más si se trata de quien ha marcado la pauta en los últimos años por sus títulos, enfrente una semifinal con una alineación de amateurs no le conviene a nadie. Ni a Nacional, ni al rival, presa de una injusta paradoja, pues fuera cual fuera el resultado iba a quedar mal parado, ni mucho menos a la competición.
El llamado ahora es a que se aclare el hecho. La afición, que también se vio de alguna manera irrespetada, y no solo la de Nacional, tiene derecho a saber qué ocurrió, quién dice la verdad y quién miente. No se puede perder de vista que el ‘rentado’ es la cita por excelencia de este deporte en el país, su valor roza con lo patrimonial. Hay que cuidarlo. Merece todo el respeto.
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