Una canción con letras explícitas que consideran objeto a la mujer, la salida en falso de su autor para dar una explicación sobre las mismas y una historia que se repite sin cesar, como la mayoría de los coros de las canciones de reguetón.
“La primera se desespera, se encojona si se lo echo afuera. La segunda tiene la funda y me paga pa’ que se lo hunda… Ya no sé ni con cuál quedarme y es que todas maman bien, todas me lo hacen bien”.
Las frases son de 'Cuatro babys', la polémica canción de Maluma que ha causado revuelo durante la última semana. Sin embargo, su videoclip ya se acerca a los 200 millones de reproducciones en YouTube desde su publicación en octubre pasado.
“Cada cierto tiempo nos damos cuenta de la influencia de las industrias culturales en los imaginarios sociales de los ciudadanos. El moldeamiento que logra la música tiene muchos factores de los que no somos conscientes y que solamente se hacen visibles cuando tocan fibras sensibles”, asegura el analista de medios y docente de la Universidad Javeriana Mario Morales.
La fibra sensible correspondió esta vez a Yolanda Domínguez, columnista española que, en un tono frentero, señaló al reguetonero colombiano como “misógino y machista”, en su artículo de ‘El Huffington Post’ en español publicado hace una semana.
“Uno de sus últimos trabajos, ‘Cuatro babys’, es toda una apología de la violencia hacia las mujeres que las describe como meros cuerpos intercambiables y disponibles al servicio del deseo sexual ilimitado, irrefrenable e incontrolable de los varones”, escribió la artista visual y activista en su blog en la página web ‘Huffingtonpost.es’
La inquietud de Domínguez caló más hondo cuando detalló que Juan Luis Londoño Arias –más conocido en el universo artístico como Maluma– había sido el invitado central del canal español Telecinco como asesor musical del ‘reality’ ‘La voz’; la misma franquicia televisiva que en Colombia tuvo al paisa como uno de sus jurados en la versión con niños (‘La voz kids’). (Lea también: Un fenómeno llamado Maluma)
“Me pregunto en qué estaba pensando el equipo de La voz para invitar a este ídolo de masas. Me pregunto qué habrán pensado los concursantes al ser aconsejados por él. Y también me pregunto qué pensarán los espectadores”, acota sobre la participación de Maluma en el programa ibérico.
Al tiempo con las protestas virtuales de cientos de indignados a través de Twitter, Facebook e Instagram rondó la pregunta de quién se hace responsable por este tipo de contenidos, que llega sin filtro alguno a todos los públicos (sin importar edad, sexo, condición social).
“El tema del reguetón es viejo, y la gente suele hacerle el quite diciendo que le importa solo el ritmo, como si eso y la letra no fuesen inherentes y condensados. El reguetón es un espejo del machismo raizal que hay en nuestro país”, agrega Morales.
“¿Responsables? Muchos. Tan responsable el que escribió semejante agresión sexual a la mujer como quien la cantó, quienes la programan y quienes la consumen”, adiciona Germán Yances, otro reconocido analista mediático.
La respuesta del artista no fue más atinada que la letra de ‘Cuatro babys’, en la que lo acompañan los raperos Noriel, Bryant Myers y Juhn All Star como invitados.
“Por una cosa o la otra siempre te van a juzgar, solo haz lo que te salga del corazón, lo que te haga feliz. Si hablaron de Jesucristo, ¿por qué te sorprendes cuando hablan de ti? (sic)”, señaló Maluma en su cuenta de Instagram.
La nueva vieja polémica
Desde que Puerto Rico y Panamá se disputan los orígenes del reguetón, se ha hecho referencia al imaginario social que representa el género como la cultura del dinero fácil: las joyas (el ‘blin blin’), los autos deportivos, las armas, las agresiones físicas y verbales y el establecimiento de un macho alfa, rodeado de mujeres medio desnudas para usarlas a su antojo. (Lea también: Reykon, Maluma y J Balvin, la 'trinidad' del reguetón colombiano)
“Las canciones no son un invento aislado, sino un retrato de la sociedad (...). Lo único que ha hecho el reguetón es poner de manifiesto una cultura machista; sus letras están fundamentadas en el machismo de hombres y mujeres: de hombres que asumen a las mujeres como cosas y de mujeres que lo aceptan de ese modo”, aporta Morales.
“... Está medio gordita, pero la chupa chévere. Eso en cuatro no se ve (...). Yo me la chicho, le empujo el bicho, si a última hora cualquier roto saca leche, ella me dice que en la cara se la eche...”.
Por ejemplo, ‘Eso en cuatro no se ve’, de los puertorriqueños Ñejo y Dálmata, desató en el 2010 un escándalo mayúsculo entre los detractores del género, que se había afincado en la mente colectiva desde finales de los años 80 y que una década más tarde llegaría a la radio para quedarse.
“Al respecto de las letras de las canciones ha habido muchos estudios. Recuerdo uno que se hizo sobre el Gran Combo de Puerto Rico, en los años 80 y 90. Decía que legitimaron una manera de asumir el mundo, a través de canciones como ‘Y no hago más na’’. Hablaba de la vida relajada, de no trabajar, de dedicarse a comer, dormir y rumbear. Hubo muchos reclamos al respecto”, explica Morales. (Además: Campaña viral combate letras de reguetón que ofenden a las mujeres)
Laura Pérez Sánchez fue una de las tantas mujeres que han expresado su inconformismo con la letra de ‘Cuatro babys’. Por eso lidera una petición en la plataforma virtual Change.org para que el video sea retirado de YouTube. Su iniciativa ya ha recolectado 80.000 firmas (necesita llegar a 150.000).
El debate ha trascendido la indignación del público y llegó a los círculos musicales entre los colegas del reguetonero paisa, que acaba de cerrar una multitudinaria gira por España y Argentina.
“Maluma es mi amigo, pero eso no me exime de darme cuenta de que a veces sus canciones son muy perversas, realmente muy malas musicalmente y, dentro de la lírica, muy pobres (...). No sé qué tanta sea la culpa solo de Maluma, sino también de la radio por valorar más ese tipo de canciones sobre las de gente que ha venido trabajando con otro tipo de mensaje”, dijo el también cantante Carlos Vives en entrevista con W Radio.
En contraste, Yances sí cree que el artista debería asumir su responsabilidad.
“Maluma es, sin duda, una de las estrellas más relumbrantes en la escena musical actual (...). Por eso su canción ‘Cuatro babys’ ha caído muy mal en la opinión, porque la letra confunde erotismo con vulgar pornografía pura y dura, que irrespeta, cosifica y denigra de la mujer”, dice.
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