En horas de la mañana de este martes, la tragedia anunciada, lo que tanto temían los habitantes de La Mojana, en Sucre, se convirtió en realidad, pues el río Cauca rompió por uno de los puntos vulnerables o chorros y comenzó a entrar poco a poco agua de su caudal al municipio de Guaranda, mediante la zona rural.
El alcalde de Guaranda, Pablo Rivas, quien ya había anunciado una emergencia de grandes proporciones, lanzó un S.O.S. al gobierno departamental y nacional.
“El río rompió en el punto ubicado en la finca del exalcade Eriberto Arce y el agua, que penetró por un boquete de 10 metros, ya pasa con fuerza porque el rompedero creció hasta los 50 metros y está haciendo daños en los cultivos.
Situación preocupante porque cada minuto que pasa crece más el boquete”, dijo el mandatario.
Rivas agregó que los sectores que se ven afectados inicialmente son los barrios Las Mercedes y Luis Amanda Pulido y de allí el resto del casco urbano.
"Así como las veredas San Rafael y el Socorro, entre otras. Confío en que podamos controlarlo, pero lamentablemente esta situación se está presentando por la falta de apoyo por parte del gobierno nacional, que aún no viabiliza los proyectos que hemos presentado”, declaró.
Habitantes de la zona aseguran que en el punto por donde entra el Cauca con fuerza en estos momentos se ubica un jarillón que protegía de inundaciones a la cabecera municipal, el cual se ubica a 150 metros del casco urbano.
La ruptura por este punto, pone en riesgo, no solo a los habitantes de Guaranda, sino también a los de Majagual y Sucre (Sucre).
“La angustia es infinita, si esto no se controla pueden haber consecuencias desastrosas. Ya la administración municipal pudo conseguir retroexcadoras que están colocándoles palos grandes al boquete para que mitiguen el ingreso del agua”, preció a EL TIEMPO Andersón Durán, habitante de Guaranda.
LUZ VICTORIA MARTÍNEZ
Especial para EL TIEMPO
Sincelejo.