“Cuando el campo detonó empecé a sentir tranquilidad y paz. Pensaba que estar muerto era chévere, yo sentía mucha calma. El otro soldado, que estaba conmigo, también quedó herido y cuando gritó reaccioné y empecé a sonreír. En ese momento le di gracias a Dios por darme la oportunidad de vivir otra vez”.
Así explica Jhon Bolívar, patrullero de la Policía, cómo se sintió en el momento en el que cuatro minas antipersonales, de 16 artefactos explosivos, se activaron en el momento en que las iba a destruir.
Bolívar, como muchos otros policías, ha arriesgado su vida en diferentes operaciones para capturar a cabecillas de grupos terroristas y narcotraficantes. Él ha estado en la institución por nueve años, y su vida cambió el mismo año en que cayó, en la operación Solemne, alias ‘Megateo’, guerrillero del EPL y narcotraficante.
El 16 de agosto del 2015 comenzó una de las persecuciones contra 'Megateo' en la vereda Guayabón, municipio Playa de Belén, Norte de Santander. En esta operación participaba el patrullero de la Policía Jhon Bolívar, quien ahora tiene 30 años, junto con otros miembros de la Dijín, el Ejército y la Fuerza Aérea.
Tres días después, el 19 de agosto, en medio de la operación, Jhon, junto con otros compañeros encontraron un campo minado y advirtieron al resto del equipo. Cuando él, junto con un hombre del Ejército se dispusieron a destruir el campo, se activaron cuatro minas que había en esa zona, dominada por el EPL.
Debido a la explosión de los dispositivos uno de los soldados murió. Por su parte, Jhon fue ayudado por otros de sus compañeros, quienes le prestaron primeros auxilios y lo trasladaron a la Clínica San José de Cúcuta.
“Cuando llegué no veía nada, quedé totalmente ciego. Tenía herida la parte izquierda de mi cuerpo, entre otras cosas me colgaba un dedo y tenía expuesto el hueso del brazo. Pero mi preocupación mayor era la vista”, afirma el patrullero.
Desde ese día, el proceso de recuperación de Bolívar comenzó. Los médicos le realizaron 19 cirugías. Entre ellas, una para la reconstrucción de su pierna izquierda y un trasplante de córnea en el ojo de esa misma parte de su cuerpo, pues debido al accidente perdió el 50% de su visión.
Después de tres meses de reposo y tratamientos Jhon pudo volver a su trabajo, ya no participando en operaciones contra cabecillas de grupos terroristas y narcotraficantes sino como instructor del curso de operaciones especiales de la Policía “hasta que recupere más la visión, pues hasta ahora empecé a ver sombras y a definir colores. Soy optimista y espero lograr un 70% de vista”, indica Bolívar.
Megateo, finalmente, murió a inicios de octubre en medio de un operativo de las autoridades. (Lea también: 'Megateo', el golpe más importante desde la muerte de 'Alfonso Cano')
Un reconocimiento a su labor
El 8 de noviembre pasado, en medio de la celebración de los 125 años de la Policía Nacional, Jhon Bolívar fue condecorado por su heroísmo. Además de esto fue reconocido con un viaje a Corea del Sur, donde estará 12 días, que se realizará a principios del próximo año.
Sobre el reconocimiento que le hizo la institución, el patrullero -quien vive en Sibaté, Cundinamarca, con su madre- explica que “más que el reconocimiento a la labor que uno efectúa significa una motivación para volver a hacer lo que tanto me gusta”.
El comisario de Policía Alberto Cantillo afirma que el evento buscaba “hacer un reconocimiento a esas personas que han entregado su condición física y su vida a la Policía. Asimismo se hizo para ponerlos de ejemplo ante las nuevas generaciones” y agrega que “esta conmemoración fue hecha para decirles ‘ustedes son muy valiosos, hicieron mucho por la patria y la institución’”.
Finalmente, Jhon, quien hoy espera seguir sirviendo al país y a la institución a la que pertenece, a pesar de lo vivido, afirma que “las limitaciones solo están en nuestra cabeza. Hay muchas personas que siempre van a querer atentar contra nuestro cuerpo pero nunca podrán dañar nuestro corazón. Este es el motor principal para continuar con el amor con el que uno hace las cosas”.
MANUELA POLO NAVAS
ELTIEMPO.COM