Los paisas Miguel Gutiérrez y Mauricio Moreno, y el bogotano Nicolás Páez decidieron abrir el General Michel en Bogotá, siguiendo el gusto que tenía uno de ellos por preparar micheladas: una mezcla de cerveza, zumo de limón, sal e ingredientes picantes.
Partieron de reunirse muchas tardes a mezclar cervezas, frutas y ajís, hasta que alcanzaron un resultado positivo y afinaron detalles de su carta con la ayuda de un mixólogo o bartender.
Son en total diez micheladas (tres picantes y siete frutales) que se pueden mezclar con cerveza y ‘envenenar’ (reforzar) con tequila y ginebra, entre otras bebidas. El proceso es lúdico y la idea es que en la mesa los comensales agreguen a la cerveza al mismo tiempo dos shots: uno con zumo de limón y el otro con la michelada escogida.
El concepto de la Revolución mexicana es la esencia del lugar, pues desde un principio los socios se basaron en la leyenda del general Michel (Isidro Michel López), un militar que llevaba a los soldados después de las batallas a su cantina favorita a disfrutar de la cerveza con limón y salsa picante, y así levantarles el ánimo. En su honor se bautizó michelada a esta mezcla.
Por esto, tanto la decoración como la oferta gastronómica de General Michel hacen alusión a esta historia, aunque “a modo de sátira y sin intención de ofender ningún principio político”, indica Mauricio Moreno.
“No quisimos jugar tanto con el concepto de lo militar, sino con la idea de que Isidro Michel era buen general y muy dado a los soldados, entonces decidimos tener una carta con comida para compartir”, explica.
En esa carta, creada por el chef Christian McAllister, se encuentran platos fuertes (entre 18.000 y 30.000 pesos) como las fritas anticastristas, con cuatro hamburguesas cubanas de res condimentadas con chorizo picante, que eran famosas antes de la revolución en la isla caribeña.
En sus primeros meses hicieron énfasis en estos platos para compartir, pero no querían verse como un restaurante de picadas. Así que de la mano de McAllister y del chef José Berrío incluyeron algunos platos individuales como el steak Michel, el roulette de salmón, los sumergibles (sándwiches de la casa) y varias pizzas hechas en fuego de leña, entre otros.
A partir de las recomendaciones de sus clientes, se crearon los especiales de los domingos, con platos grandes como la pata de cerdo, que dejan marinando por tres días y es para compartir, o la bondiola en salsa de tamarindo, la cual preparan en horno de leña y que hará parte de la nueva carta que están por estrenar.
En cuanto al bar, tiene un atractivo happy hour en todas las bebidas, incluyendo botellas, al que bautizaron ‘pelotón de fusilamiento’, que empieza a las doce de la noche los viernes y los sábados.
¿Dónde y cuándo?
General Michel. Calle 118 n. 5-41, Bogotá. Abierto de lunes a miércoles de 12 m. a 11 p. m. Jueves, hasta las 12 p. m. Viernes y sábado, hasta la 1:30 a. m. y domingo, hasta las 6 p. m. Teléfono: 314 286-0944. Facebook: generalmichelbog.
LAURA GUZMÁN DÍAZ
Para EL TIEMPO