A la fuerza y por encima de una pared fue sacada una menor indígena wayú que estaba internada en un Centro de Recuperación Nutricional en Riohacha.
Según se conoció, y quedó registrado en video, el padre de la menor, con la ayuda de su tío y dos indígenas de esa misma comunidad indígena, la sacaron a la fuerza del centro de salud. El padre trepó una pared de más de tres metros de altura y una vez arriba recibió de manos de las indígenas a la menor y la pasó al otro lado de la misma, en donde fue recibida por un tío. Luego, el progenitor se lanzó. (Lea también: Ya son 68 los niños wayú fallecidos por desnutrición en 2016).
La menor, de 15 meses de nacida y afiliada a Cajacopi, había estado varias veces recluida por desnutrición, pues su peso era de 6,9 kilogramos y su talla de 70 centímetros.
Hace una semana, antes de que sacaran a la niña del centro de nutrición, funcionarios del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (Icbf) localizaron a la bebé en su comunidad y la trasladaron al hospital San José de Maicao, de donde fue remitida al Centro de Recuperación Nutricional, en Riohacha, una vez allí volvió a presentar fiebre y diarrea por lo que fue traslada a la clínica Renacer.
Cuando fue dada de alta, la menor fue trasladada nuevamente al Centro de Recuperación Nutricional, en donde sus familiares ya habían pedido retiro voluntario.
'Choque cultural'
“Es otro ejemplo del choque cultural entre dos sociedades, la wayú y la occidental. Ellos no entienden la nuestra y nosotros tampoco entendemos la de ellos, toca, antropológicamente, ser muy inteligentes para poder educarlos en dos vías. Para poder disminuir la mortalidad en estos niños es un proceso en doble vía, difícil”, puntualizó el Secretario de Salud Departamental, Stevenson Marulanda.
Así mismo, el médico Marulanda asegura que “espero que la nación entienda y nos ayude. No solo es para que no se mueran los niños, sino la barrera cultural entre las dos culturas es un tema muy fuerte, necesita mucha antropología y conocimiento”.
Por su parte, el líder wayú Javier Rojas, dijo que “esto es el resultado de la falta de atención con enfoque diferencial. La atención se debe hacer en la comunidad”.
Además, señaló que las comunidades indígenas sufren cada vez que le arrebatan a un menor para llevárselo a un centro de recuperación, por la falta de recursos para trasladarse lejos de su territorio y para sobrevivir en la ciudad a donde son trasladados.
La solución que propone Rojas es que las entidades prestadoras de salud brinden un apoyo a los familiares cuando se trasladan a las cabeceras municipales, ya que para una madre no es fácil abandonar a sus otros hijos.
“Cuándo se lleva uno a atención, abandona dos o tres que también sufren, ya que no tienen alimentos ni agua. El padre tiene que salir a trabajar y los otros familiares no pueden hacerse cargo”, puntualizó Rojas.
Finalmente, señaló que la situación es bastante compleja: no hay agua, no hay alimentos, no hay empleo, no pueden cultivar por la falta de lluvias, no hay salud y no tienen recursos para trasladarse a un centro de salud.
RIOHACHA