Desde todos los rincones del país, las víctimas del conflicto se mostraron honradas con el reconocimiento que el presidente Juan Manuel Santos les hizo tras recibir el premio de Nobel de Paz.
Asimismo, pidieron continuar con el proceso con las Farc para acabar, de una vez por todas, la disputa con ese grupo.
Pastora Montilla, coordinadora de la Mesa Departamental de Víctimas del Quindío y víctima de las Farc en 2006, recibió con agrado las palabras del mandatario colombiano, a quien le pidió que no permita que la guerrilla se levante de la mesa de diálogos en La Habana.
“Queremos que continúe el proceso, pedimos a gritos que pare la guerra. Aquí no pierden las víctimas, pierde todo el país. Vemos propuestas alentadoras en el punto 5 de los acuerdos (sobre las víctimas)”, aseguró.
Por su parte, Misael Delgado, vocero de la Mesa Nacional de Víctimas en Atlántico, le mandó un mensaje a Santos: que su trabajo por conseguir la paz ha sido acertado y beneficioso.
"Nos honra el premio Nobel para el Presidente, además que es inmensamente merecido por todos los esfuerzos que ha hecho. Es un estímulo para todo aquel que haya sido afectado por el conflicto", manifestó.
En Neiva, Alexánder Martínez, representante de víctimas en Huila, dijo que, por el bien del país, el proceso no debe trabarse: “Es inconcebible pensar en abandonar el inmenso terreno que se ha ganado en las negociaciones”.
Comentó que fue emocionante escuchar la dedicatoria de Santos: “No lo esperábamos. Creemos que él es quien ha tenido toda la paciencia y sabiduría para solucionar las dificultades, tras 4 años de diálogos muy difíciles. El premio es un mensaje claro de la comunidad internacional en el sentido de apoyar todos los esfuerzos en bien del país”.
Gina Arias Rodríguez, representante de la Ruta Pacífica de las Mujeres en Risaralda, afirmó que sienten “un respiro y un aliento en estos días que han sido tan críticos para el proceso de paz”, luego del resultado del plebiscito.
Señaló también que “la comunidad internacional está mirando la importancia que en el país terminemos la guerra por la vía política y negociada”.
“Nos sentimos absolutamente reconocidas. Creemos que el trabajo que hemos hecho las mujeres víctimas durante estos 20 años tiene un eco tanto en el presidente Santos, como en otras organizaciones. Es de mucho júbilo saber que nos sentimos reconocidas y que seguimos estando en el centro de la negociación”, manifestó.
Y Audrey Bayona, integrante de la Ruta Pacífica de Mujeres en Santander, espera que se logre mantener el cese al fuego bilateral y que no se modifique lo pactado en el acuerdo en el tema de género, “pues los derechos de las mujeres que quedaron consignados en el proceso se lograron tras un trabajo muy fuerte de propuestas que enviamos a La Habana”.
Igualmente, la dirigente afirmó que las organizaciones sociales “seguirán acompañando al Gobierno y a las Farc para lograr una salida negociada al conflicto armado y que se pueda salir de la encrucijada en la que estamos”.
Miguel de la Vega, miembro del Comité Ejecutivo de la Mesa Departamental de Víctimas en Santander, dijo que tras el anuncio del galardón espera que el proceso comience lo más rápido su implementación.
“Sería ideal que con esto se puede extender, a partir del 31 de octubre, el cese bilateral al fuego, pues las vidas que se han salvado en este país por el proceso son muchas. Creemos que no puede haber más muertos por la guerra. Hemos sido muy generosos con la guerra y tenemos que empezar a ser generosos con la paz”, valoró.
Desde Caldas, Ezequiel Amador, desplazado y líder de víctimas de los municipios del norte de ese departamento, aseveró que "esa condecoración para Santos es como si a nosotros nos hubiera tocado una partecita”. Y resaltó que es una muestra de que "a nivel internacional saben de nuestra tragedia y el Presidente ha levantado un poco la bandera por nosotros".
El excongresista Óscar Tulio Lizcano, quien estuvo ocho años secuestrado por las Farc y sufrió la retención de uno de sus hijos durante tres meses por el Epl, también considera que el reconocimiento "genera las capacidades de convocatoria, con el apoyo de la comunidad internacional, para lograr la concordia entre los del 'Sí' y los del 'No'".
Y Luz Elena Galeano, representante de los desaparecidos en Medellín, destacó que el objetivo es que los acuerdos que construyó el Gobierno con las Farc, en los que se incluyó la participación de las víctimas, se puedan llevar a cabo.
“El premio nos da una esperanza y una lección. Nos muestra el reconocimiento internacional del camino que se ha construido para ponerle fin al conflicto. Es un trabajo de más de cuatro años que afuera es valorado”, resaltó, al tiempo que añadió que Santos ha conocido el sufrimiento de las víctimas y se ha acercado mucho a ellas.
Sandra Castañeda Sanabria, coordinadora de la Mesa de Víctimas en Tolima, contó que están pasando por momentos de incertidumbre y que el premio debe servir para mantener la voluntad del proceso: “Las Farc dijeron que la guerra había culminado, y nosotros les creemos”.
Finalmente, en Cali, Fabiola Perdomo, esposa del diputado Juan Carlos Narváez, asesinado en cautiverio por el grupo subversivo, resaltó que el Nobel es "un gran homenaje a todos los muertos que ha puesto este conflicto y a los sobrevivientes del mismo. Creemos que compromete a las víctimas a seguir luchando por la reconciliación, el perdón y la paz de este país. También es un homenaje al Presidente, a su trabajo y a su entrega por darnos a los colombianos un país mejor".
NACIÓN
*Con información de los corresponsales