La turbiedad y la cantidad de material que taponó la bocatoma del río Escalerete llevaron a la suspensión del servicio de agua potable en el puerto de Buenaventura.
Desde finales de septiembre han caído fuertes precipitaciones sobre la zona, lo que generó que hasta la bocatoma del Escalerete llegaran palos, material de arrastre y se generaran los problemas.
Desde el pasado 30 de septiembre hasta la fecha, han arreciado las lluvias, lo que, según Hidropacífico, la empresa encargada del servicio, ha llevado a suspensiones continúas, todos los días, en el suministro.
Son 400.000 habitantes del Puerto los que resultaron afectados en estos cortes.
El restablecimiento se dio de forma paulatina, según Hidropacífico. La parte baja ya cuenta con agua potable, debido a que en las últimas horas se pudo trabajar en la bocatoma y se espera que en 24 horas la presión mejore y se haya normalizado el servicio en todo el municipio.