La serie de aguaceros en Cali no solamente es sinónimo de inundaciones y tráfico lento, sino que también provocan caída de árboles o ramas y cortes de agua.
El domingo, cuando se desataron tres temporales que algunos asocian con la tormenta Matthew, en el acuaparque de La Caña se cayó un árbol que terminó en una carpa. Allí, murió Wilfredo Franco Gómez, de 39 años, y salieron lesionadas 25 personas, nueve de ellas de consideración.
El árbol estaba censado por el Dagma y mostraría buenas condiciones. En el acuaparque aseguran que estaban como apoyo 37 personas, entre ellos 10 salvavidas, 2 paramédicos, 15 logísticos y 10 de seguridad.
La situación fue de drama para Jhon Aider Florez y su esposa Leidy Viviana Zapata Micolta, quien amamantaba su bebé bajo la carpa y sufrió una doble fractura en su pierna izquierda. Tras una discusión con su EPS y la intervertención del defensor del Paciente, Alexánder Camacho, le fue programada cirugía para este lunes en la clínica de Los Remedios.
“Ante el vendaval, por los altoparlantes se les anunció que salieran de la zona, lamentablemente, pasó con quienes se quedaron en el toldo buscando escamparse, es la primera vez que esto sucede en años”, dijo Néstor Vélez, administrador del acuaparque, quien anotó que en las 4 zonas del centro recreativo se dispone de una aseguradora que atiende los primeros auxilios y lleva pacientes a centros médicos.
Según el Dagma, en Cali se atienden hasta 14 llamadas por árboles caídos en un día de lluvias. Las razones son impacto de rayos, enfermedades por maltrato, raíces con poca profundidad o simplemente vejez. El censo dice que en la ciudad hay 296.000 árboles, de los cuales se han evaluado 7.900 y más de 4.650 han sido intervenidos por precaución.
El subteniente Jhon Fitzgerald Rodas, coordinador de Telemática del Cuerpo de Bomberos, señaló que este año se han atendido 214 casos por caída de árboles, de ellos 148 han afectado la integridad humana, 31 vehículos y 35 escuelas, hospitales o viviendas. Además, 56 casos por caídas de postes de energías, palmas, techos, vallas y antenas de comunicaciones.
Rodas hizo un llamado a reportar los árboles que pueden significar peligro, como los que tienen encharcamiento en base, ramas secas, roedores en tallo, los que estén afectados por construcciones o choques e inclinados.
El Dagma dispuso la línea de emergencia 350 315 0834. Los árboles censados no pueden ser talados sin autorización, dijo Ana Carolina Castro, líder de arborización.
Mientras tanto, hay quejas por cortes de agua que son atribuidos a turbiedad en el río Cauca.
CALI