Luis Enrique confiesa uno de sus secretos para permanecer activo en la música durante casi cuatro décadas: “Me nutro de muchas cosas, pero escuchar ha sido mi escuela. Nunca he dejado de escuchar de todo, desde niño, en la adolescencia y ya como músico profesional. Siempre ha sido mi tarea constante escuchar a otros y traducir sus lenguajes al mío al momento de escribir, componer o hacerles arreglos a mis canciones”.
El nicaragüense, conocido como el ‘Príncipe de la salsa’, vuelve al ruedo con 'Cuando se juega con fuego'. Después de 15 álbumes de estudio, optó por la tendencia del mercado musical: presentar sencillos.
“Es que se desperdiciaba mucha música. Me he unido a esta tendencia. Como artista independiente me funciona mucho mejor así”, comenta en entrevista telefónica con este diario, que atiende desde su casa en Miami.
Cuando se juega con fuego es una composición original del cubano Amaury Gutiérrez. “Se la escuché durante una presentación que hizo en Miami, hace unos cinco o seis años. Era una canción pop, pero de inmediato me la imaginé en ritmo de salsa”.
En ese lapso, Luis Enrique presentó dos álbumes –'Soy y seré' y 'Jukebox: primera edición'–, pero no incluyó la canción porque “sentía que no encajaba”.
“Las canciones tienen vida propia. Todas comienzan como una idea sencilla y a partir de ahí vas decidiendo cómo vestirlas, qué atuendo les vas a poner para que se luzcan y crezcan. En este caso, quería que la canción se sintiera sabrosa, que se pudiera bailar y que también pudieras escucharla, simplemente”, explica el productor y también jurado del reality televisivo de talento musical La Voz Perú.
En el 2009, en la vida artística del nicaragüense hubo una fractura, cuando presentó un tema con el cual puede decirse que hay un Luis Enrique antes y otro después: 'Yo no sé mañana'.
“Marcó profundamente mi carrera, llegó en un momento en el que llevaba mucho tiempo de no sonar en la radio, incluso, mucha gente pensó que me había retirado. Entonces, salir con un tema como ese y haber abarcado tanto en tan poco tiempo pues te marca (…) Me trajo varios premios y hasta el día que sea artista formará parte de mi repertorio”, comenta acerca de la composición que coescribieron el cubano Jorge Luis Piloto y el colombiano Jorge Villamizar (ex Bacilos).
Nacido en el seno de una familia de artistas, Luis Enrique Mejía (Somoto, Nicaragua, 1962) se inclinó por el canto y la composición en un universo de folclor, música y poesía.
“Era inevitable ser músico, no tocar lo de mi país y aprender de mi papá y mis tíos, sobre todo, la responsabilidad que eso implica”, recuerda el artista, quien siendo apenas un niño memorizó Alforja campesina, de su tío Carlos Mejía Godoy. Sería la primera canción que se aprendió.
Por estos días, el ganador de tres premios Grammy Latino y uno anglo reparte su tiempo entre la música, la fotografía y la finalización de un libro autobiográfico que revelará detalles inéditos.
“El proceso creativo es muy distinto a lo que hago. Pero te garantizo que no hay nada como escribir canciones”, asegura el autor de éxitos como Date un chance (1990), Así es la vida (1994), Cómo volver a ser feliz (2009) y Yo voy pa’ encima (2015), esta última fue una colaboración con el reguetonero cubano El Mola.
SOFÍA GÓMEZ G.
CULTURA Y ENTRETENIMIENTO