La Dirección de Tránsito de Bucaramanga (DTTB) reveló que únicamente dos personas de la institución conocían la clavede la caja fuerte en la que permanecían las 22 armas (19 revólveres y tres pistolas) y que desaparecieron del lugar.
El robo quedó al descubierto después de que la semana pasada agentes de la Policía decomisaron en un operativo en Santa Marta un revólver que estaba en poder de un ladrón.
Al realizar el procedimiento de rutina, para determinar el origen del arma, los uniformados establecieron, con base en los documentos oficiales, que el revólver pertenecía a la Dirección de Tránsito de Bucaramanga, donde debía permanecer bajo el cuidado de funcionarios si no estaba siendo usada.
“El almacenista y un ayudante eran los que venían desde hace muchos años haciendo la custodia”, aseguró Miller Salas, director de Tránsito, al tiempo que indicó que contra ellos ya cursa dos investigaciones por parte de la Fiscalía y otra a nivel interno.
Ambas personas se convierten en los principales sospechosos porque la caja (ubicada en la sede de la DTTB) no presenta ningún signo de violencia, según las autoridades.
A pesar de ello, Salas sostuvo que continuarán trabajando en la DTTB porque “partimos de la buena fe. Cuando nosotros empezamos (enero de 2016) ellos continuaron allí porque llevan muchos años en la institución y la conocen”.
La última vez que se inventariaron las armas fue en 2013 y por eso, de acuerdo con el director, la administración anterior “no hizo entrega oficial de ellas”.
Además de los 19 revólveres y tres pistolas, en el listado se encuentran nueve carabinas que siguen en poder de la institución. Sin embargo, la DTTB ya comenzó el proceso para entregarlas a la Quinta Brigada del Ejército.
La decisión de deshacerse de las armas, que antiguamente los agentes de Tránsito utilizaban en su función de vigilancia, se tomó el jueves de la semana pasada cuando la DTTB se enteró del robo.
“Ese día nos llamó un inspector de Santa Marta para comentarnos de la capturan de un delincuente con un arma que nos pertenecía e inmediatamente hicimos la denuncia respectiva ante la Fiscalía”, afirmó Salas.
El director añadió que ante el ente investigativo contará lo que sabe “y es que en años anteriores se habían perdido algunas armas”.
Miguel Cantillo Mantilla
ADN BUCARAMANGA