Este jueves, la Corte Constitucional hundió el Tribunal de Aforados por supuestos vicios de forma y de fondo. Así mismo, el alto tribunal en junio de este año también falló para tumbar el Consejo de Gobierno Judicial, razón por la cual se revivió la Judicatura. Estos dos organismos eran dos de los mayores cambios en el equilibrio de poderes. Entonces, esta reforma ¿cómo queda?
En la parte política, su principal efecto fue ponerle fin a la reelección en Colombia, que había revivido gracias a la cuestionada reforma del 2004, la del escándalo de la 'yidispolítica'. El Congreso aprobó la prohibición de la reelección con un componente adicional: solo podrá revivir a través de un referendo, no por un acto legislativo ordinario. (Lea también: La Corte Constitucional hundió el Tribunal de Aforados)
El del 2004 no tuvo esa condición y fue el que permitió, en el 2006, la reelección de Álvaro Uribe y, en el 2014, la de Juan Manuel Santos.
La Corte consideró exequibles esos cambios y están plenamente vigentes.
En la parte judicial la historia es mucho más compleja, pues desde un primer momento las altas cortes se opusieron a una reforma que, en la práctica, les quitaba poder. Tras más de una década de intentos fallidos, el Congreso sacó adelante una reforma que eliminaba el muy cuestionado Consejo Superior de la Judicatura, creaba un nuevo tribunal para los altos magistrados, en reemplazo de la Comisión de Acusación, y eliminaba prácticas cuestionadas en las altas cortes.
La Corte Constitucional ya revivió la Sala Administrativa de la Judicatura y, ahora, la Comisión de Acusación.
Con esas decisiones, en la parte judicial, los efectos serán mínimos. Hasta ahora va desapareciendo la Sala Disciplinaria de la Judicatura y se mantienen prohibiciones como la de la puerta giratoria (el salto de los magistrados de una corte a la otra) y el 'yo te elijo, tú me eliges', que permitía que las cortes postularan como candidatos a exmagistrados que habían participado en la conformación de sus salas (los magistrados eligen las vacantes en la Corte Suprema y el Consejo de Estado, por el sistema de cooptación, de listas enviadas por la Judicatura).
JUSTICIA