La Contraloría General de la República (CGR) consideró que hubo falta de previsión en el manejo de la crisis energética y el cargo de confiabilidad, la cual habría causado un detrimento patrimonial, por 53.700 millones de pesos, en el Fondo de Subsidios de Energía.
El organismo determinó que el manejo de recursos del cargo por confiabilidad durante la crisis energética fue ineficaz y estableció un presunto detrimento patrimonial de 53.700 millones de pesos.
Además, estimó que la actuación del Ministerio de Minas frente a la crisis energética también fue ineficaz.
“Faltó diligencia y coordinación entre las instituciones, las medidas propuestas fueron tardías y no había razón para señalar exclusivamente a El Niño como justificación de la crisis”, agrega un boletín de la CGR.
La entidad estableció hallazgos por deficiencias en la gestión de la Comisión de Regulación de Energía y Gas (Creg) y de XM, firma que opera el sistema interconectado nacional.
El organismo agrega que el incremento tarifario para aliviar las pérdidas de los generadores térmicos que operan con combustibles líquidos, que costó 476.539 millones de pesos, fue un traslado efectivo de las pérdidas económicas de las compañías a los usuarios.
"Este ajuste de tarifas, permite identificar un daño patrimonial de $ 53.700 millones que corresponden a la parte cubierta con subsidios, que son recursos del Presupuesto General de la Nación", agrega la CGR.