Alberto Mario Cabrera Barrios, alias Ñeco, señalado de ser el sicario que asesinó al director regional de Medicina Legal, Eduardo Pinto Viloria, debía estar cumpliendo en su casa con una medida de aseguramiento domiciliaria en el proceso por un robo en una peluquería. (Lea también La señalada viuda asesina de jefe de Medicina Legal)
Sin embargo, actualmente es un prófugo de la justicia. En su historial aparece que había sido capturado en un frustrado asalto a una peluquería en el barrio La Paz de Barranquilla, el pasado 30 de diciembre.
De su fuga se percató el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) el pasado 9 de junio, luego de que una comisión realizara una visita de control. El reporte arroja que el Inpec no lo encontró en su domicilio, en el barrio El Pueblo, suroccidente de la capital del Atlántico, sector que Cabrera Barrios había registrado como sitio de domicilio para cumplir con la medida. (Además: Cruce de mensajes enreda a esposa del jefe de Medicina Legal asesinado)
Alias Ñeco, quien presenta varias anotaciones judiciales por los delitos de hurto calificado y porte ilegal de armas de fuego, se convirtió en un habitante más del barrio El Pueblo, donde se hacía pasar por un honrado albañil, por lo que más de uno de sus vecinos se sorprendió del señalamiento de las autoridades.
Alberto Mario Cabrera Barrios aparece involucrado en el crimen de Eduardo Pinto Viloria, ocurrido el pasado 4 de mayo.
En su contra está, además de otras pruebas, el testimonio de Jesús Gutiérrez Arrieta, alias Chucho, uno de los tres confesos coautores capturados. Los otros dos son el chofer de confianza de la víctima, Johan Beltrán Ulloque, y el taxista Miguel González.
Los tres aceptaron los cargos por homicidio agravado y concierto para delinquir agravado y están en la penitenciaría de El Bosque, mientras que Dayana Jassir, esposa de Eduardo Pinto, fue enviada a la Cárcel para Mujeres El Buen Pastor.
BARRANQUILLA