El líder opositor británico, el laborista Jeremy Corbyn, se rehusó a dimitir este martes a pesar de una aplastante moción de censura de sus diputados, 172 de los cuales votaron por su destitución y tan solo 40 votaron a su favor.
"Fui elegido democráticamente líder de nuestro partido para una nueva forma de hacer política, por el 60% de los miembros del laborismo y sus partidarios, y no voy a traicionarlos mediante una dimisión.
La votación de los diputados no tiene ninguna legitimidad" dijo Corbyn mediante un comunicado.
La moción de censura de los diputados tendría que ser ratificada por una mayoría de los más de 150.000 afiliados al partido para que Corbyn, un veterano socialista, abandone su cargo.
Corbyn llegó a la jefatura del Partido Laborista en septiembre pasado, tras el fracaso de las últimas elecciones generales.
Su escasa participación en la campaña de los favorables a la permanencia del Reino Unido en la Unión Europea fue criticada por la cúpula del partido.
La mayoría de su gabinete ha dimitido, para expresar su desacuerdo con el rumbo del laborismo bajo su dirección.
AFP