El gobernador del Tolima, Óscar Barreto Quiroga, hizo público su desacuerdo con la escogencia de los municipios de Planadas y Villarrica como zonas veredales de concentración para albergar guerrilleros de las Farc. (Lea también: Doce claves para entender las zonas veredales y campamentos de Farc)
“Fue desconocida, totalmente, la autoridad departamental”, aseguró el mandatario y agregó que “es una decisión inconsulta”.
Desde el corregimiento de Villarrica, a donde viajó para reanudar una Estación con 25 Policías, señaló que “no comparto ni estoy de acuerdo que en el departamento nos coloquen siquiera una zona de concentración, pero aquí el Presidente puede ordenar sus cosas”.
Barreto ganó las elecciones con el aval del Partido Conservador, y también conquistó los votos del Centro Democrático. Sin embargo, su apoyo declarado al proceso de paz le generó una dura polémica con seguidores del uribismo que calificaron de "traición" esa actitud del mandatario.
El choque surgió el pasado nueve de abril, en una visita que hizo el presidente Santos al municipio de Chaparral, en la que Barreto dijo que sería "totalmente incondicional con el presidente en su búsqueda de la paz".
Pero este viernes también declaró que las zonas sur y una parte del oriente del Tolima llevan 52 años de guerra con muertos, desplazados, así como tierras desvalorizadas, “y ahora que intentan buscar un entendimiento, otra vez van a condenar estas regiones, eso es injusto”. (Además: En veredas de estos 23 municipios se concentrarán las Farc)
"Lo que Tolima necesita es concentrar recursos del Estado para sacar esta adelante sus municipios y necesitamos un gobierno que le duelan las regiones apartadas", aseguró el Gobernador.
También dijo que no fue informado por el Gobierno Nacional de esta decisión y se enteró de las zonas de concentración a través de los medios de comunicación. “Yo no sé si es que para que haya concertación conmigo, tendría que tener un fusil terciado”, manifestó.
Ocho días atrás había publicado en la red social Twitter que “ubicar tan solo una zona de concentración en el Tolima, sería muy grave económicamente para nuestro territorio”.
En Planadas, un municipio limítrofe con Huila, ubicado a 5 horas de Ibagué, también reina la expectativa pero el alcalde José Funor Dussán considera que “si es por la paz, vamos a jugarla porque Colombia necesita la paz”.
“Si el pueblo lo toma a bien, si el pueblo apoya esto, yo apoyo al pueblo”, aseguró el Alcalde y afirmó que "Planadas no quiere más muertos, ni desplazados, ni madres llorando a sus hijos”.
Manuel Enrique Moreno, concejal de Villarrica, considera que su municipio requiere de abundante inversión social porque "primero vivimos la guerra de partidos y luego vinieron los ataques guerrilleros".
IBAGUÉ