Para el serbio Novak Djokovic el camino hacia su primer título del Roland Garros sigue siendo color de rosa, pues no solamente ha jugado bien y ha superado las rondas iniciales, sino que dos de sus fuertes rivales –el suizo Roger Federer y el español Rafael Nadal– no están.
Por eso es que el mundo del tenis está pendiente del segundo grand slam del año, los aficionados quieren saber si el número uno del mundo, ¡por fin!, levanta ese trofeo, uno de los que le falta en su listado de victorias.
Este lunes, el juego contra el británico Aljaz Bedene tuvo que ser aplazado, como el resto de la jornada, algo que no pasaba desde el torneo del 2000, por la lluvia, un clima que no ha dejado en paz a este certamen.
Después de 17 años, Federer no juega en el torneo francés, debido a que no se ha recuperado de su espalda, mientras que Nadal, nueve veces campeón de Roland Garros, se fue por una lesión en la muñeca izquierda, por lo que el camino al serbio se le abrió.
A la espera de levantar su primera Copa de los Mosqueteros, el serbio ha comenzado a conquistar el corazón de los franceses. Tras cada partido se dirige a ellos en francés, multiplica las citas con los medios de comunicación, canta, se disfraza, bromea, siempre tiene un gesto amable, una palabra para el niño que le pide un fotógrafo. Ya no se comporta como hace unos años, cuando imitaba a Nadal o a John McEnroe. Ya no finge problemas físicos para desestabilizar al rival.
¿Y los contrincantes?
Con la baja de Nadal, su ruta hacia su cuarta final, la segunda consecutiva, aparece totalmente despejada.
De los 7 rivales que figuran en su parte del cuadro, ninguno parece, sobre el papel, en disposición de desviarle de su objetivo, que lo convertiría en el octavo tenista de todos los tiempos en poseer los cuatro grandes.
Ninguno le ha ganado un partido en los últimos tres años, lo que muestra que el serbio también gobierna sobre la pista.
Bautista, su rival por un puesto en los cuartos de final hoy, si el clima dejaba, solo le ha arrebatado un set en cuatro partidos y tampoco le han derrotado en ese periodo, ni Tomas Berdych ni David Ferrer, sus teóricos rivales por un puesto en las semifinales.
Ni tampoco el español Marcel Granollers, el austríaco Dominic Thiem, el belga David Goffin y el letón Ernests Gulbis, candidatos a ser su rival en semifinales.
La última vez que ‘Djoko’ perdió contra uno de ellos fue en el torneo de Roma del 2013, cuando cayó contra Berdych. El serbio avanza hacia el título con seguridad. Si vence a Bautista igualará a Nadal con 10 cuartos de final en Roland Garros, uno menos que Federer.
Además, se clasificaría por trigesimosexta vez para unos cuartos de un grand slam, igualando así a André Agassi en una clasificación también dominada por Federer, con 47.
De conseguirlo, encadenaría 27 cuartos de grandes consecutivos. Estadísticas insuficientes para considerarlo el jefe de Roland Garros.
AGENCIAS