Educación, normatividad y trabajo en equipo son las herramientas que usarán las autoridades locales para hacer frente en Villavicencio a la basura tecnológica, conocida como Residuos de Aparatos Eléctricos y Electrónicos (RAEE).
Esta fue una de las conclusiones del primer Foro Municipal de Residuos RAEE, realizado ayer en el teatro Rosita Hoyos de Villavicencio, y que según la organización del evento, fue transmitida vía Internet a más de 120 países.
Y es que las cifras son para tomar muy en serio esta problemática, pues según Reinel Cortés, gerente de Federaee, en la capital del Meta cada habitante de la ciudad genera en promedio 5,2 kilogramos anuales de estos desperdicios.
Lo más preocupante es que la capital del Meta no cuenta con un centro especializado para disponer de estos desechos que, por sus componentes altamente tóxicos, no se pueden mezclar con la basura convencional, y por ello en muchos casos son arrojados a espacio abierto, con el negativo impacto ambiental que implica.
Precisamente, esta radiografía fue presentada abiertamente y por ello tomó más fuerza la iniciativa de trabajar de manera conjunta tanto del sector público como privado.
El concejal Fabián Bobadilla se comprometió a presentar un proyecto de acuerdo ante el Concejo para que a través de esta herramienta el municipio se ajuste a las disposiciones legales acerca de este tipo de basura.
Jennifer Aroca, secretaria de Medio Ambiente local, sostuvo que este año se adelantará una intensa campaña de educación ambiental, la cual involucrará a colegios y a empresas.
También se buscarán dispensadores para que la gente deposite los RAEE en puntos como la Alcaldía, el Concejo, entre otras entidades públicas.
Federaee, por su parte, continúa con la recolección y evacuación de estos desperdicios.
Empresa extranjera reciclará residuos
Luis Torremocha, director ejecutivo de la empresa española Movilex, anunció que adelantan gestiones para adecuar en varias zonas del país, entre ellas Villavicencio un centro de acopio para almacenar y procesar basura RAEE.
El objetivo de la empresa es recoger los inservibles y reciclarlos en búsqueda de elementos que a través de un proceso industrializado convertirlo en materia prima como plástico, cobre, aluminio,
entre otros.