Llegan las dos etapas esperadas, las dos últimas oportunidades para que el colombiano Esteban Chaves descuente y luche por el título del Giro de Italia o para que el líder, el holandés, Steven Kruijwijk, sentencie la carrera.
El portador de la camiseta rosada no llega tranquila a estos dos días, sabe que no la tiene fácil, pero cuenta a su favor con las diferencias sobre sus rivales y que las fuerzas de los protagonistas ya están al límite.
Varios piensan que no hay nada que hacer, que los tiempos que maneja el holandés son suficientes para ganar, incluso, en el mismo lote lo dan como el campeón.
“Es el corredor más fuerte de este Giro de Italia. Es cierto que quedan dos días complicados, pero es tal la fortaleza y el saber correr que tiene, que yo creo que él va a ser el campeón al final”, señaló Alejandro Valverde, quien está a 3 minutos 23 segundos del líder.
Sin embargo, el español no se da por vencido y ayer dio el grito de batalla: “Mañana (hoy) puede pasar de todo y estoy preparado. Claro que voy a ir a por todas. Será difícil, pero si estoy en el Giro es para intentarlo. No puedo decir dónde puedo atacar”.
Kruijswijk sabe que lo van a atacar, que no la tendrá fácil, pero está preparado para afrontar esta última parte de la carrera.
“Estar muy atentos para evitar sorpresas es la consigna. Serán etapas duras, con finales en alto después de complicados descensos y estoy preparado”, señaló el líder de 28 años.
Ya las fuerzas están al límite, eso se ha podido ver en los últimos días, y también está presente que Kruijswijk es el más fuerte del lote de los sobrevivientes, y solo queda esperar un mal momento de él para desbancarlo del primer puesto, algo que no parece viable.
“Fuerzas no tiene nadie, el líder es el mejor de todos, eso lo ha demostrado. Chaves deberá luchar por conservar ese segundo puesto, porque Valverde se va a amover. El colombiano debe aguantar, su rueda es el español”, le dijo a EL TIEMPO Benito Urraburu, periodista especializado en ciclismo del Diario Vasco.
Urraburu coincide en que esperar un mal día del líder es similar a decir que sus rivales no tienen con qué quitarle la diferencia.
“Kruijswijk tiene una ventaja importante, que no es fácil de bajar y debe correr con esa tabla, su ventaja es su mejor aliado”, precisó el comunicador.
El primer gran asalto es este viernes, cuando el Giro transite por la jornada de 161 km entre Pinerolo y Risoul, con la cima Coppi de pro medio y una final en premio de montaña de primera categoría, ascenso de 13 km con rampas promedio del 7 por ciento de inclinación.
“¿Por qué no va a tener un mal día el pelirrojo holandés? Tiene un buen colchón a su favor sí, pero en la gran montaña los minutos caen como pasan los kilómetros. Chaves, por su parte, tiene ante sí una oportunidad única para llevar su sonrisa blanca al podio de Turín. Cometió un error, y así lo reconoció, pero mostró su fortaleza física y mental y, si sigue la rueda buena, no debe faltar en el cajón del Giro 2016”, precisó el periodista de www.biciciclismo.com, Unai Iraragorri.
Y este sábado será el último chance para los que se logren acercar un poco al líder del Giro de Italia, Guillestre y Sant'Anna di Vanadio, de 150 km, tres ascensos de primera categoría y uno de tercera, en la meta, donde se encontrarán rampas del 11 por ciento de inclinación.
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