Los colombianos sí están ahorrando y la mayoría lo hace de forma voluntaria, según las firmas Sura Asset Management y Merlin Research, que revelaron una encuesta que consultó la opinión de 12.000 personas no solo en Colombia, sino en otras cinco naciones latinoamericanas.
Los resultados indican que, si bien siete de cada 10 colombianos ahorran de forma voluntaria, este hábito los sitúa en el tercer lugar entre ese grupo de países, en el que el mayor nivel de ahorro lo tienen los peruanos, 74 por ciento, seguido por el de los mexicanos, 73 por ciento.
El estudio ‘Ahorro Latam 360°’ señala además que los colombianos están entre las personas más conscientes frente a la responsabilidad de construir un ahorro pensional, después de los chilenos, mientras que las mujeres son las que más influyen en la conducta del ahorro de las familias, con un 46 por ciento, la cifra más alta entre los seis países de Latinoamérica que participaron en el estudio.
(En gráfico: Las cifras del ahorro de colombianos frente a otros países de la región)
Otro de los hallazgos muestra que el 21 por ciento de los nacionales saben cuánto recibirán de pensión y la mitad de ellos indicaron que son conscientes de que la responsabilidad de lograr una buena pensión les corresponde a ellos mismo y no al Estado, el empleador o su fondo de pensiones.
El estudio reveló que el 41 por ciento de los consultados en México, Colombia, Perú, Chile, Uruguay y El Salvador coincidieron en que la mujer es quien promueve e incentiva el ahorro en sus familias y que su figura es especialmente influyente para los jóvenes.
Entre los mecanismos que utilizan los colombianos para promover el ahorro en sus hijos está el evitar las compras inútiles (24 por ciento) y el uso de la alcancía (19 por ciento). “La cultura del ahorro es algo que no se enseña en el colegio, sino que es algo que se aprende en el núcleo familiar. Los padres son los principales responsables de educar financieramente a los hijos”, afirma Fabio Chavarro, gerente general del Grupo Juriscoop.
Esto quizás ha permitido que en los jóvenes cada día haya más conciencia sobre la importancia del ahorro, aunque sus objetivos difieran de los de los mayores.
¿Cuáles son las diferencias?
En Colombia, el 23 por ciento de los jóvenes ahorran para viajar; un 22 por ciento, para proyectos personales; 17 por ciento, para imprevistos, y 14 por ciento, para adquirir productos.
Entre los adultos esas cifras son: 36 por ciento para enfrentar cualquier imprevisto, 23 por ciento para el futuro, 19 por ciento para proyectos personales y 13 por ciento para inversión en finca raíz.
“A más edad, aumenta el interés de prepararse para las emergencias, así como en asegurar el futuro y elevar el monto de la pensión”, dice el estudio. Los bancos son el lugar que los consultados prefieren para el ahorro.
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