Una fumigación en el municipio de La Calera habría sido la causa de una grave emergencia sanitaria que alcanzó a afectar a otros dos municipios del departamento de Cundimarca.
Según los reportes de las autoridades, una persona murió mientras era atendida en la Clínica Saludcoop de La Calera, presuntamente tras inhalar la sustancia tóxica, y cuatro más fueron atendidas por la misma causa.
Uno de ellos fue remitido a la clínica Santa Fe, mientras que otros tres fueron llevados al hospital Santa Clara de Bogotá.
Los afectados se recuperan en centros asistenciales. Se trata de campesinos de la región que se dedican al cultivo de papa.
La Gobernación de Cundinamarca extendió la emergencia a los municipios de Sopó y Tocancipá, y se alertó sobre una posible contaminación del agua potable en esas localidades.
“Hacia la 1:30 (de este miércoles) se nos reportó el caso de cinco personas que llegaron a la Clínica Saludcoop de La Calera; lamentablemente, una de ellas falleció en el centro médico”, señaló el capitán Farfán, delegado departamental del Cuerpo Oficial de Bomberos de Cundinamarca.
Mientras atendían la emergencia, personal médico del centro asistencial comenzó a manifestar los mismos síntomas, por lo que la Clínica Saludcoop fue evacuada para evitar una intoxicación masiva.
“Galenos y auxiliares presentaron la misma sintomatología, por lo que se cerró la clínica preventivamente”, señaló Farfán.
Un cuerpo especializado de Bomberos de Bogotá se trasladó hasta el municipio para realizar la investigación en la clínica, con el fin de identificar el material químico que fue utilizado para la fumigación y las razones por las que el personal de la salud también resultó afectado.
Al momento, la Secretaría de Salud de Bogotá se encuentra levantando el parte médico de los cuatro pacientes que sobrevivieron.
BOGOTÁ