Tras el accidente presentado este miércoles en el municipio de La Calera, en donde cinco cultivadores de papa resultaron afectados por el mal manejo de un químico con el que estaban fumigando, la Gobernación de Cundinamarca decretó la emergencia sanitaria en La Calera, Sopó y Tocancipá (Lea: Cinco personas intoxicadas tras fumigación en La Calera).
Según explicaron en la entidad, el gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey, tomó la decisión, luego de conocer el informe presentado por la Unidad Administrativa de Gestión del Riesgo (Uaegrd) de Cundinamarca, en la que se informa que las quebradas Manantial Truchera y Los Trinos "se encuentran contaminadas por elementos potencialmente peligrosos para la salud", señaló la entidad en un comunicado.
Estos cuerpos de agua hacen parte de la jurisdicción de La Calera, pero llegan a los municipios de Sopó y Tocancipá, por lo que se espera que las autoridades departamentales tomen medidas "tendientes a lograr la protección de la ciudadanía cundinamarquesa", indican en el comunicado. La declaratoria de emergencia tendrá vigencia de 15 días.