Este martes se reactivó un viejo y conocido eslogan que ha identificado a la capital en la última década. Se trata de ‘Bogotá, 2.600 metros más cerca de las estrellas’, que el Instituto Distrital de Turismo retomó con algunos cambios de enfoque.
Adriana Marcela Gutiérrez, directora de la entidad, apunta que la intención es “consolidar la marca de ciudad, teniendo en cuenta que es una herramienta para promovernos hacia el exterior y hacia la ciudadanía, usando atractivos y experiencias positivas que ofrece la ciudad. Se busca consolidar la marca desde un nuevo acento”.
En el Museo Nacional (8 p. m.) se reveló la imagen, con sus nuevos colores y características. Los astros, como elementos destacados, vuelven a ser protagonistas. Gutiérrez habló con EL TIEMPO sobre la estrategia y aclaró que la Marca Bogotá no se debe confundir con la marca de la actual administración (‘Bogotá, mejor para todos’).
¿Qué busca el eslogan?
Acercarnos nuevamente a ‘2.600 metros más cerca de las estrellas’, que fue durante un tiempo la principal marca de la ciudad y aún tiene alta recordación entre la ciudadanía y los turistas; de ahí que en el Distrito hayamos querido resaltar de nuevo esa connotación.
¿Cuáles son las nuevas características visuales?
Vamos a tener acento en tres estrellas. El color, para el turismo, es el azul, resaltando nuestro cielo y el hecho de que Bogotá es una ciudad viva; de otro lado, porque es un color que representa modernidad e innovación. Las estrellas van a ser amarillas, un color muy cercano a Bogotá, que además refiere a la música, el arte, la cultura y el deporte de talla mundial.
¿Desde cuándo surge la idea de relanzar la marca?
Le venimos trabajando desde principios de este año, y sabemos de la importancia de Bogotá para el exterior porque es una ciudad que cuenta con un gran atractivo desde el punto de vista de los negocios que aquí se consolidan, desde la industria de eventos, así como por su reconocimiento de espacio cultural a nivel internacional. Sabemos que debemos estar más fuertes en una marca que nos cobije a todos y vaya más allá de un tema ocasional.
¿En qué se mejoró?
La marca existe desde hace ocho años (2008), sino que no ha sido tan posicionada, se ha vendido más hacia el exterior y con unos enfoques muy puntuales, como inversión y un poco de turismo. En esta ocasión queremos poder acercarla y que se reconozca como un atractivo para los 8’500.000 visitantes que cada año vienen a Bogotá.
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