Del aval del Ministro de Agricultura dependería este martes la suerte de Friogán, cadena de frigoríficos que, en su mayoría (78,6 %) son de propiedad del Fondo Nacional del Ganado, el cual se nutre de los parafiscales que aportan cerca de 500.000 familias ganaderas.
Así lo confirmó Armando Daza, presidente de la empresa, que está contra las cuerdas porque no ha logrado un consenso sobre el acuerdo de pago a los acreedores, en torno a una deuda de 76.000 millones de pesos.
Para este martes está prevista la conclusión de la asamblea, que ya ha tenido varios aplazamientos, incluyendo el de la semana pasada, cuando se suspendió el proceso decisorio, sin elegir junta directiva ni aprobar el acuerdo de reestructuración de pasivos.
Friogán está en reorganización y en riesgo de ser liquidada, porque la propuesta de acuerdo presentada ha sido considerada inviable, ya que plantea pagar a 10 años, mediante abonos trimestrales.
Según Daza, “la propuesta está dentro de lo que permite la ley, y las proyecciones apuntan a que en esa década se lograría un flujo de recursos por 150.000 millones, casi el doble de la deuda”.
Agrega que “ella misma tiene cómo salvarse y que, además ya se ha adelantado el camino para que los mismos ganaderos puedan comprar deuda y convertirla en acciones".
Por estos avances, indicó Daza, el acuerdo ya ha sido avalado en un 40 por ciento por acreedores y socios (se requiere la mitad más uno). Pero, al decir del presidente de la empresa, estaría prácticamente en manos de Minagricultura, cuya firma equivale al 38 por ciento.
Daza indicó que la decisión de los ganaderos es salvar a Friogán, pero el dilema está en que, hasta el momento, el Ministerio no ha dado señales de acompañar la propuesta de acuerdo, por considerarla unilateral, entre otras razones.
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