Las fiestas domingueras de champeta y salsa en plena vía pública en el corregimiento de La Boquilla de Cartagena fueron interrumpidas anoche por las voces de líderes cristianos que llamaron a detener la fiesta para dedicarle unos minutos a una oración, como protesta a la decisión emitida la semana pasada por el juez décimo primero administrativo oral de Cartagena, Alejandro Bonilla Aldana, quien ordenó suspender la oración y los abrazos en los actos oficiales de todas las entidades públicas, como defensa a la libertad de cultos.
Así comenzaron las oraciones masivas en Cartagena, como protesta a la medida judicial. Las maratones de oraciones continuarán hoy en parques, plazas, centros comerciales, juzgados, gobernación, alcaldía y barrios.
“Esta una iniciativa pacífica que se llevará a cabo hoy y mañana en barrios y parques de toda la ciudad, y es liderada por todo el pueblo de creyentes en Dios todopoderoso. Nadie nos puede prohibir la oración y los abrazos. Esta ciudad y este país necesitan más oración y menos leyes absurdas”, dice la pastora cristiana Lida Arias, líder de la iglesia ‘Castillo de oración y milagros’, y gestora de la iniciativa.
Una gran movilización está programada para mañana martes a las 5 de la tarde en la plaza de la Aduana, donde se espera que se reúnan 12.000 seguidores de la iglesia ‘Castillo de oración y milagros’, y una decena de iglesias más entre evangélicas y cristianas, para rechazar la decisión.