Harmony of the Seas, el barco de cruceros más grande del mundo, partió este domingo domingo desde Francia con rumbo al puerto británico de Southampton. Esto ocurrió tres días después de que los astilleros franceses STX se lo entregaran a la naviera estadounidense Royal Caribbean.
La embarcación mide 362 metros de eslora (desde la proa hasta la popa), 66 metros de manga y pesa 227.000 toneladas. En esta se han invertido 1.000 millones de euros. Su capacidad es de más de 8.000 personas (unas 6.000 de pasajeros y otras 2.394 para miembros de la tripulación).
“No solo es el más grande del mundo, sino también el más respetuoso con el medioambiente”, afirmó en la ceremonia de entrega el director general del astillero STX, Laurent Castaing. A esa declaración, el presidente ejecutivo del armador, Richard Fain, añadió que Harmony of the Seas es también “el más caro”.
Numerosos habitantes de Saint-Nazaire, en la costa oeste de Francia, acudieron con pañuelos blancos para darle el último adiós al barco, que efectuará un primer crucero inaugural desde el 22 de mayo, partiendo de Southampton con destino a Barcelona (España). Allí se encuentra su puerto base, hasta finales de octubre. Este es el tercer barco de la familia Oasis de la Royal Caribbean, que ha necesitado de 32 meses de trabajo tras el inicio de su construcción, en septiembre de 2013. Entre los récords de los que presume se incluye el Ultimate Abyss, el tobogán más alto de alta mar, con una caída de más de 30 metros que permite alcanzar los 14 kilómetros por hora. Según la naviera, intimidará “a los más valientes”.
La salida del puerto francés se dio sin problemas poco después de la 1 p. m., hora local, tras una maniobra que, según la cadena francesa BFM TV, se ensayó con simuladores durante casi un año, debido a su complejidad.
El vacío que deja este crucero en el astillero francés será ocupado desde ya por otros cuatro nuevos barcos de cruceros que fueron encargados el pasado abril por MSC, otra compañía de cruceros, en un pedido de 4.000 millones de euros y cuya entrega está prevista entre el 2022 y el 2026.
EFE