Después de ser considerado como el mejor ‘9’ del mundo y de hacer parte del 11 ideal de la ‘Fifa/FIFPro’ en enero del 2013 por sus brillantes actuaciones y poder goleador con el Atlético de Madrid campeón de la Liga de Europa y la Selección Colombia que logró la clasificación a la Copa del Mundo de Brasil 2014, Falcao García decidió irse al AS Mónaco, equipo de la Liga de Francia que deseaba regresar a la élite y hacerle frente al poderoso París Saint-Germaín (PSG), con el apoyo de la multimillonaria chequera del magnate ruso Dmitry Rybolovlev.
“Influyen varios factores. En lo personal, coincidía mucho con los propósitos que tenía de llegar a los lugares más altos de Europa, para eso va a trabajar el Mónaco. Fue muy importante saber que cuentan conmigo y que vamos de la mano junto con el club para conquistar esos objetivos", dijo Falcao cuando fue presentado como refuerzo del Mónaco para la temporada 2013-2014.
Sin duda fue un castillo de oro para el colombiano. En su momento se dijo que Mónaco había pagado 55 millones de euros por Falcao, aunque el año pasado ‘Football Leaks’ reveló el contrato de transferencia entre el Atlético de Madrid y el Mónaco: el equipo francés pagó 43 millones de euros, según el contrato.
Falcao firmó por cinco temporadas, a cambio de 14 millones de euros netos por temporadas de comienzo y con libertad para manejar sus contratos de publicidad. Eso, mal contado significada 1,2 millones de euros, libres de impuestos de salario mensual.
La lesión
Pero seis meses después de su fichaje, el ‘Tigre’ conocería el infierno en el Principado. Claudio Ranieri, su técnico por ese entonces, el mismo que acaba de dirigir al Leicester a su histórico primer campeonato en la Premier League Inglesa, alineó al estelar artillero colombiano en un partido de la segunda ronda de la Copa de Francia, contra el modesto Chasselay de la tercera división. Su idea era darle ritmo de competencia a Falcao, quien llevada un mes y diez días inactivo por una lesión muscular.
Sin embargo, luego de haber anotado el primer gol del equipo y a los 39 del primer tiempo, el defensa Soner Ertek disputó un balón con él y le provocó una grave lesión: rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda. La operación y recuperación demoraron más de seis meses. Así, fue descartado de la Selección Colombia que disputó de manera brillante el Mundial de Brasil. La lesión partió la carrera de Falcao en dos, desde ese día el ‘Tigre’ dejó de rugir por las canchas del mundo. Su presente se hizo gris y su futuro, incierto.
Después de recuperarse de la lesión, en la temporada 2014-2015, fue transferido a préstamo al Manchester United inglés dirigido por el holandés Lois van Gaal. Jugó 29 partidos y anotó cuatro goles. La prensa y la afición lo criticaron fuertemente, pues su gran salario no se traducía en goles. Para esta temporada fue transferido al Chelsea, pero tampoco ha tenido continuidad. Ha jugado 12 partidos y solo ha hecho un gol. Estuvo de baja más de cuatro meses por un desgarro en el muslo derecho.
Según versiones de prensa, Chelsea ya informó que no hará uso de la opción de compra de los derechos deportivos de Falcao.
La esperanza
Así las cosas, Falcao debe regresar de manera obligatoria al Mónaco, ya sea para quedarse en él o para que desde él sea transferido a otro club. Sin embargo, esa segunda opción parece descartada luego de las últimas declaraciones del propio Falcao: "Mónaco quiere que vuelva sí o sí", dijo. Como lo contó, el equipo de la liga francesa quiere retribuir parte de la fuerte inversión que hizo en él.
Mónaco también puede significar una nueva esperanza para el ‘Tigre’, volver a jugar, recuperar algo de lo que lo hizo estrella. Tener continuidad y minutos. Recuperar la confianza y con ella, los goles.
La apuesta del Mónaco era hacerle contrapeso al PSG que lidera Zlatan Ibrahimovic, pero hasta ahora no lo ha conseguido. Esta liga la perdió hace dos meses. A falta de una jornada ocupa la tercera posición, con 30 puntos menos del muy temprano campeón PSG. Lyon, el segundo, apenas tiene tres puntos más que Mónaco.
En la última fecha de la Liga, este fin de semana, Mónaco se juega su clasificación a la Liga de Campeones europea, pues clasifican directamente los dos primeros. Si mantiene en el tercer puesto jugará la fase de repesca.
Pero si Mónaco pierde en el juego de la última fecha contra Montpellier y Niza le gana a Guingamp, caería al cuarto lugar, lo que lo sacaría de la Champions. En ese caso, disputaría la próxima Europa League.
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