La exsecuestrada Ingrid Betancourt aseguró este jueves en Bogotá que “reconciliación no se conjuga con olvido, no es borrón y cuenta nueva, sino que es todo lo contrario, es la obligación de hacer memoria”.
Lo dijo al participar en el foro 'La Reconciliación, más que realismo mágico', organizado por la Fundación Buen Gobierno y en el que en varias ocasiones no pudo contener las lágrimas al recordar lo que tuvo que padecer durante los seis años que estuvo cautiva en manos de las Farc.
“No hay nada más fuerte que el perdón para detener la deshumanización”, dijo Betancourt, quien tras su liberación salió del país.
Para ella una palabra clave en el país es confianza, pues reconciliarse implica “volver a confiar en el otro”. Sin embargo, dijo que esto es “duro” en un país donde esto se puede entender como una falta de carácter.
De acuerdo con ella, la reconciliación “no es un asunto entre víctimas y victimarios, es una búsqueda de equilibrio donde todos encontremos nuestro legítimo interés”.
Durante su intervención, de cerca de media hora, señaló que aquellos que más han sufrido la guerra son los que más buscan la reconciliación y, a su vez, aquellos que menos han estado expuestos a los rigores de la violencia se muestran a menudo más intransigentes.
“Nosotros como sociedad aspiramos que no haya impunidad, los de las Farc requieren seguridad jurídica, ambas ambiciones son justas y no son incompatibles. La posibilidad de una justicia transicional es una propuesta creativa y madura para resolver esta ecuación”, señaló.
A renglón seguido dijo que las críticas que buscan pintar un cuadro apocalíptico de la aplicación de este tipo de justicia juegan con el miedo de cada uno de nosotros.
“Este esquema de justicia transicional puede ser una verdadera solución para dar seguridad jurídica sin ceder a la impunidad”, señaló Betancourt, quien al terminar su intervención recibió el aplauso de pie de los asistentes.
Precisamente en el marco de esa reconciliación, Ingrid se reunió anoche con su compañera de secuestro, Clara Rojas, con quien tuvieron diferencias durante el cautiverio y terminaron alejadas.
Esta mañana, en diálogo con 'Caracol Radio', Rojas dijo: "Fue un encuentro muy tranquilo, porque ambas estábamos pensando en que la cosa saliera bien y en términos generales salimos bien libradas”. Rojas también participa como invitada en el foro.
Los otros invitados
Entre las víctimas que participan en el foro también está el exdiputado Sigifredo López, quien fue secuestrado por las Farc junto a otros 11 diputados del Valle del Cauca. Todos sus compañeros murieron, convirtiéndose así en el único sobreviviente. Estuvo siete años en cautiverio y dos años después de su liberación fue capturado por las autoridades luego de que un juez lo ordenase por su supuesta participación en el plagio. La justicia cerró ese proceso y hoy en día López es presidente de la organización Defensa de Inocentes.
Además está el mayor general (r) Luis Mendieta, quien estuvo secuestrado durante 12 años, y Óscar Tulio Lizcano, quien estuvo en manos de las Farc durante ocho años hasta que logró fugarse con la ayuda de un guerrillero.
En cuanto a los representantes de los sectores políticos están el jefe del equipo negociador en La Habana, Humberto de la Calle; la exministra Marta Lucía Ramírez; el integrante del Partido Centro Democrático, Carlos Holmes Trujillo, y el codirector del Partido Liberal, Horacio Serpa.
Por parte del sector privado hace presencia el presidente de Coca-Cola Femsa Colombia, la presidenta ejecutiva de la Cámara de Comercio de Bogotá, el presidente ejecutivo de Telefónica Colombia y el presidente de Bancolombia.
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