La Corte Suprema de Justicia anuló las sentencias dictadas el 30 de noviembre de 1987 y el 31 de marzo de 1989, por el Juzgado Sexto Civil del Circuito de Cartagena y la Sala Civil de ese Distrito Judicial, que declaraban a un amplio territorio de la Ciénaga de la Virgen, en el norte de la ciudad, como un bien privado.
El pasado lunes, la Corte decretó la nulidad de todo lo actuado durante tres décadas en este proceso, y que fue aprovechado por particulares para la tala de mangle, el montaje de rellenos y las construcciones ilegales en una zona rica en recursos naturales y escenario de biodiversidad.
La Corte, en su último pronunciamiento, asegura que este litigio recayó sobre un bien de propiedad del Estado.
La Ciénaga de La Virgen es uno de los cuerpos de agua más importantes de Cartagena y pulmón de la región Caribe, con 22 kilómetros de extensión, 4.5 kilómetros de ancho, 1.20 metros en su zona de mayor profundidad y bordea unos 60 barrios de la zona suroriental de la ciudad.
El Distrito de Cartagena, a través de María Eugenia García, jefe jurídica de la alcaldía, celebró la decisión de la corte que defiende este bien público y pulmón ambiental de la nación.
“Este fallo marca un hito en la defensa de los bienes públicos del Distrito donde hay unos valores ambientales y donde se sabe que es una zona intervenida de manera irregular. Este fallo sienta un precedente con respecto a la tala de mangle, de los rellenos y de la consolidación de terrenos que son de uso público y que pertenecen a la nación. El Distrito lo acatará, porque además fue una demanda de revisión que solicito el propio Distrito en septiembre del año 2004”, sostuvo García.
La revisión de la sentencia surge a partir de una acción de tutela presentada por el director de medio ambiente de la época Rafael Vergara, quien logra que la Corte Constitucional ordene que el distrito presente el recurso.
Este recurso de revisión, ordenado por la alta corte, es un medio de impugnación extraordinaria que tiene por finalidad corregir los errores evidentes y trascendentales en que haya incurrido una sentencia ya ejecutoriada.
Impacto ambiental
El desorden urbanístico y los crímenes ambientales en esta zona, perteneciente al corregimiento de La Boquilla, son solo algunos de los resultados luego de que en 1987 el ciudadano Aníbal Olier Bueno se hizo prescribir una amplia zona de la Ciénaga de la Virgen, un cuerpo natural que es público e imprescriptible.
“Este fallo lo puede ejecutar el Distrito de inmediato y frenar esta masacre con el ecosistema”, agrega el cartagenero Rafael Vergara, quien ha liderado la defensa de este cuerpo de agua.
“Esta sentencia de revisión anula la prescripción de un particular sobre un bien de la nación, pues no pueden prescribir los bienes de uno público", explica Vergara.
El fallo se da justo cuando la zona norte de Cartagena hoy se proyecta como la de mayor desarrollo en la ciudad, incluso con la construcción de un puente sobre una zona de mangle de la Ciénaga de la Virgen.
Lo anterior, según expertos, obligará a las empresas constructoras mirar con lupa y ceñidos a la ley.
De otro lado, la destrucción del cinturón verde de la ciénaga opaca el impacto positivo que ha tenido, sobre la también conocida como Ciénaga de Tesca, la construcción de la Bocana de Estabilizada de Marea: la magnífica obra de ingeniería que hace las veces de delta y que ayuda a oxigenar con agua de mar la gris ciénaga. En los próximos meses el Distrito de Cartagena tendrá que dar a conocer el plan para recuperar la zona.
JOHN MONTAÑO
Redactor de EL TIEMPO
Cartagena