Luego de una diligencia que se realizó entre la noche del viernes y la mañana de este sábado en el complejo judicial de Paloquemao, quedó en libertad el empresario Eduardo José Benavides Rueda, investigado por presuntas irregularidades en la adquisición de un bien decomisado a un narcotraficante.
A pesar de la orden de captura inicial que se pidió en su contra y que se hizo efectiva el jueves en la noche, la Fiscalía no pidió que Benavides Rueda fuera enviado a prisión.
Esto porque el fiscal del caso pidió que se le impusiera una medida consistente en la prohibición de salir del país, que garantice que acudirá a todas las citaciones futuras en la Fiscalía y que devuelva los bienes que habrían sido adquiridos irregularmente.
Según fuentes de la Fiscalía Benavides Rueda aceptó esas condiciones.
La Procuraduría consideró que no era viable esa medida de aseguramiento y que las evidencias presentadas en la diligencia contra Benavides Rueda no justificaban ninguna restricción.
El juez 25 de garantías acogió la petición de la Procuraduría y la defensa del empresario y señaló que Benavides Rueda no representa ningún peligro para la sociedad y que acudió a los llamados anteriores de la Fiscalía. Además indicó que las evidencias entregadas no demostraron la necesidad de una restricción de su movilidad.
El empresario no aceptó los cargos de peculado e interés indebido en la celebración de contratos por lo que seguirá enfrentando un proceso penal en su contra.
El abogado Jesús Albeiro Yepes, defensor de Benavides, dijo que no se explica la orden de captura inicial pedida por la Fiscalía cuando su cliente ha estado atento al proceso dando las explicaciones del caso.
Incluso señaló que el fiscal que llevaba la investigación fue cambiado a finales del año pasado y el nuevo funcionario, que hasta ahora venía conociendo el proceso, fue quien pidió su detención para adelantar la imputación de cargos.
El caso de Benavides ha dado de qué hablar porque fue capturado una noche antes de contraer matrimonio con la actual directora del ICBF, Cristina Plazas. Según dijeron fuentes que participaron en el proceso, la detención se dio en Villeta en una celebración previa a la boda.
El caso
Las presuntas irregularidades en la venta de una finca de 1.985 hectáreas del narcotraficante Luis Enrique Ramírez, alias Micky Ramírez, terminaron por enredar al empresario Benavides Rueda.
En la noche del jueves, hombres del CTI de la Fiscalía lo capturaron para imputarle los cargos de peculado e interés indebido en la celebración de contratos.
De acuerdo con la Fiscalía, la finca Jesús del Río, propiedad del narcotraficante y ubicada en Zambrano (Bolívar), terminó en manos de la firma Inveragricol, en la que aparece como socio Benavides Rueda.
La transacción se dio a pesar de que sobre el predio había medidas cautelares y se habían denunciado irregularidades en los avalúos que se hicieron de la hacienda. EL TIEMPO había denunciado en agosto del 2011 que Eduardo de Praga Benavides, depositario del predio y padre del capturado, había terminado quedándose con parte de la propiedad.
Fuentes de la Fiscalía señalaron que en medio de una fiesta se le notificó a Benavides Rueda de la orden de captura e inmediatamente fue trasladado al búnker de la Fiscalía y luego a los juzgados de Paloquemao para la audiencia de imputación de cargos.
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