La aventura de 181 días de la fuga del capo mexicano Joaquín ‘Chapo’ Guzmán Loera terminó el viernes en la ciudad de Los Mochis, en el estado de Sinaloa (noroeste de México), en medio de una gran operación que comprometió un grueso grupo de integrantes de la Marina mexicana (que había llegado hace tres días), con la colaboración de la Administración Antidrogas Estadounidense (DEA, por sus siglas en inglés).
El 11 de julio del 2015, Guzmán Loera protagonizó una espectacular y a la vez humillante fuga del penal El Altiplano, en Almoloya de Juárez (estado de México, centro), en la que se desnudó la gigantesca corrupción que sacude al país azteca, al revelarse que el barón de la droga había elaborado un muy detallado y sofisticado plan para evadirse del control de las autoridades, una vez más.
Apodado ‘Chapo’ por su baja estatura (1,55 m), Guzmán Loera mostró siempre astucia para construir túneles por los cuales pudiera traficar drogas y escabullirse en su natal Sinaloa y otras regiones; incluso el que usó para fugarse está hecho justo a su medida.
En Los Mochis, a 200 kilómetros de Culiacán (capital estatal), el ‘Chapo’ se sentía como en su casa, seguro, a salvo de las autoridades federales que lo estaban buscando tras su fuga. Sin embargo, una denuncia ciudadana rompió el estricto cerco de seguridad que siempre lo acompañó.(Lea: Revelan detalles de la captura de Joaquín el 'Chapo' Guzmán)
El operativo, que comenzó hacia las 4:30 a. m. (hora local), tuvo como primer objetivo una de las casas en las que el capo pasó, por lo menos, la noche del jueves. Informaciones oficiales indican que el ‘Chapo’ y un segundo de su entera confianza, identificado como Orso Iván Gastelum Cruz, alias el ‘Cholo’, lograron escaparse por una alcantarilla, no sin antes presentarse un tiroteo en el que murieron cinco de los lugartenientes de Guzmán Loera y un infante de Marina resultó herido.
En la operación se decomisaron cuatro vehículos, dos de ellos blindados, y varias armas, entre ellas un lanzacohetes con dos cargas. La parada final del ‘Chapo’ y el ‘Cholo’ fue el Hotel & Suites Doux, un motel de carretera situado a las afueras de Los Mochis. En estas instalaciones, como muestran imágenes difundidas por los medios de comunicación, las fuerzas de seguridad mexicanas capturaron a Guzmán, quien ocultaba su rostro con una toalla blanca que le tapaba la cabeza, muy probablemente sacada del establecimiento.
Una de las primeras fotos del ‘Chapo’ recapturado lo muestra serio, sentado en el borde de la cama. Al fondo, una fotografía de una mujer en ropa interior a sus espaldas. El hecho estaba por hacerse oficial. A la 1 p. m. (hora colombiana), el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, anunció la noticia en su cuenta de Twitter: “Misión cumplida: lo tenemos. Quiero informar a los mexicanos que Joaquín Guzmán Loera ha sido detenido”.
Estado de derecho
Tras horas en las que los mexicanos y el resto del mundo solo tenían ese trino como confirmación de una noticia esperada, Peña Nieto, quien necesitaba de un golpe de esa magnitud para levantar su baja popularidad de 38 por ciento, dijo que las fuerzas de seguridad e inteligencia son un “orgullo” para México y aseguró que la detención de Guzmán demuestra que, “con unidad”, cualquier meta es “alcanzable” para los mexicanos.
La captura, según Peña Nieto, es un “logro en favor del Estado de derecho, resultado de la coordinación” de las Fuerzas Armadas, la Policía Federal, la PGR (Procuraduría General de la República) y el Centro de Investigación y Seguridad Nacional, a cuyos integrantes calificó de “orgullo” nacional.
“México confirma que sus instituciones tienen las capacidades necesarias para hacer frente y superar a quienes amenazan la tranquilidad” de los ciudadanos, y “lo logrado demuestra que cuando los mexicanos” trabajan “en unidad no hay adversidad imposible de superar”, añadió.
Desde el mismo día de la fuga de El Altiplano, uno de los objetivos del gobierno de Peña Nieto, sacudido por escándalos, era dar de nuevo con Guzmán Loera, para lo cual no escatimó en esfuerzos. Todas las fuerzas federales lo tenían como objetivo primordial, conscientes de que las policías locales, con su propio reglamento e institución, están minadas por la corrupción de los carteles de la droga, tal como lo evidenció el caso de los 43 estudiantes de la escuela normal de Ayotzinapa, en el sureño estado de Guerrero, en el 2014.
Pero el esfuerzo ante un enemigo tan formidable tenía que contar con apoyo internacional. Desde el mismo momento de la fuga, fuerzas de seguridad a nivel continental ofrecieron su ayuda en caso de que hubiera salido del país. (Análisis: ¿México podrá evitar otra fuga del 'Chapo' o debe extraditarlo?)
Colombia envió una comisión encabezada por los generales en retiro Rosso José Serrano, Ismael Trujillo Polanco y Luis Enrique Montenegro para asesorar al gobierno mexicano en este delicado asunto. Se comenzó a rumorar, incluso, que estaba en Costa Rica, y a esa versión contribuyeron unos desafiantes trinos de uno de los hijos del ‘Chapo’, Alfredo Guzmán, quien en septiembre posteó una foto con dos comensales con los rostros parcialmente ocultos en un restaurante con la leyenda “Agustooo aquí ya saben con quien apatoroo”.
‘Ayuda a la imagen de Peña Nieto’
La captura de Joaquín el ‘Chapo’ Guzmán favorecerá levemente la imagen del presidente de México, Enrique Peña Nieto, y pone sobre la mesa el tema de la extradición del narcotraficante, según dijo Jorge Chabat, profesor del Centro de Investigación y Docencia Económicas (Cide).
¿Cuál es el impacto que va a tener la captura del ‘Chapo’ en el gobierno de Peña Nieto y en México?
Ciertamente ayuda un poco a la imagen de Peña Nieto, pero no modifica de manera radical la percepción que se tiene sobre el gobierno porque hay otros temas que han afectado su imagen.
Para el gobierno de Peña Nieto es muy difícil revertir una imagen que se ha construido con varios acontecimientos desafortunados en los últimos meses, como la casa blanca del presidente y las desapariciones de Ayotzinapa.
¿Se procesará al Chapo en México o será extraditado?
Para extraditarlo a EE. UU. hay un proceso jurídico que toma tiempo. Sin embargo, sí hay una mayor disposición para extraditarlo en estos momentos. Es probable que haya que resolver algunos juicios de amparo que puede imponer Joaquín Guzmán. Pero sí hay una mayor disposición a la extradición porque es evidente que las instituciones mexicanas y el sistema penitenciario mexicano no garantizan al ciento por ciento que no vuelva a ocurrir una tercera fuga del ‘Chapo’, lo que sería aún más costoso.
La captura del ‘Chapo’ fortalecerá la relación de México con EE. UU.?
La relación ha sido buena en general, de colaboración. Pero la fuga del ‘Chapo’ generó alguna tensión entre los dos países porque era un narcotraficante muy buscado, y al parecer EE. UU. había colaborado en la primera captura. Y, con esto, ese punto de tensión desaparece y esto hace que la colaboración sea más fácil, aunque ha sido buena.
Redacción Internacional*
* Con Efe y AFP