Momentos de pánico se vivieron este viernes en el Estadio Nacional de Francia luego de que, en pleno partido amistoso entre la selección de ese país y Alemania, se escucharon fuertes explosiones.
Olivier Giroud y Andre-Pierre Gignac anotaron para que la selección francesa le ganara 2-0 a Alemania, pero la celebración se vio empañada por los ataques, que ocurrieron en la primera mitad del partido.
El presidente François Hollande se encontraba en el estadio, situado en el norte de París, pero fue evacuado cuando se escucharon las explosiones.
Helicópteros de la Policía sobrevolaron el estadio al sonar el pitazo final, después de que Hollande se trasladó al Ministerio del Interior para “atender la situación”.
"Estamos todos en estado de shock", dijo el seleccionador alemán, Joachim Loew. "El partido y los goles quedan en un segundo plano en un día como este".
"Nos dijeron en los vestidores lo que había pasado. Los que estábamos en los bancos de suplentes estábamos un poco asustados por una amenaza de bomba que se produjo hoy, cuando nos pasamos tres horas fuera (de nuestro hotel)", agregó.
Imágenes de televisión mostraron a los integrantes de ambos planteles viendo las escenas que se producían en la capital francesa, a través de pantallas ubicadas en el interior del estadio.
El partido se jugó hasta al final, pero hubo tensión en la multitud cuando se esparcieron las informaciones sobre los ataques.
Los espectadores fueron retenidos en el estadio y espontáneamente se reunieron en el terreno de juego.
Videos de la insólita escena fueron compartidos por redes sociales.
Hélicoptère, pelouse envahie, scènes surréalistes. pic.twitter.com/PT5HXyKbDK
— Vincent Menichini (@v_menichini) noviembre 13, 2015
REUTERS