Bienvenido
has creado tu cuenta en EL TIEMPO. Conoce y personaliza tu perfil.
El correo electrónico de verificación se enviará a
Revisa tu bandeja de entrada y si no, en tu carpeta de correo no deseado.
NO, CAMBIAR CORREO
SI, ENVIAR
Queremos que encuentres las noticias que más te interesan
Sigue tus temas favoritos en un lugar exclusivo para ti.
Recuerda que para ver tus temas en todos tus dispositivos, debes actualizar la App de El Tiempo.
descubre
¨mis noticias¨
Un lugar exclusivo,
donde podrás seguir tus
temas favoritos .
¡elígelos!
¡hola!
Aquí también puedes encontrar "Mis Noticias"
y seguir los temas que elegiste en la APP.
¡Descubre cómo funciona!
lo último
La manera más rapida para ponerte al día.
Mis noticias
Una sección exclusiva donde podras seguir tus temas.
editar favoritos
Cuando quieras, cambia los temas que elegiste.
¡Tus temas favoritos han sido guardados!
Ahora estas siguiendo
4 TEMAS
Te contamos como funciona
LO ÚLTIMO
La manera más rapida para ponerte al día.
MIS NOTICIAS
Una sección exclusiva donde podrás seguir tus temas.
EDITAR FAVORITOS
Cuando quieras, cambia los temas que elegiste.
VER MIS NOTICIAS
Lo haré después
Recuerda que para ver tus temas en todos tus dispositivos, debes actualizar la App de El Tiempo.
Extemporaneidad y excesos del paro / Opinión
Los paros son como las ganas de darse en la jeta II, podría ser el título de esta nota. Porque incluso con diálogos a la vista y otros acuerdos que se estaban -y están- logrando en el resto del país, en el Meta, la intensión era ver sangre en las narices y hacer comer tierra a los que se perciben como contrarios -es decir al gobierno y sus políticas agrarias- por vía de la victimización de la población civil.
En busca de ello, en fórmulas maquiavélicas, no importó el derecho de los menores a la educación, el derrame de crudo sobre fuentes de agua, el daño en bien ajeno y la desproporcionada exhibición de fuerza bruta, en procura de sitiar a Villavicencio como se ha hecho con Tunja y Florencia.
Se pierde con ello la solidaridad y comprensión de las reclamaciones y se intuye la infiltración en el paro. Por esta vía, lo que se había ganado en la opinión, se desvanece ante la barbarie.
Se supone que si se sobrepone por encima de todo los propios intereses, se deslegitima la dimensión social y el sentido colectivo de la protesta.
OTTO SALAZAR PÉREZ
Docente de Unillanos
Llegaste al límite de contenidos del mes
Disfruta al máximo el contenido de EL TIEMPO DIGITAL de forma ilimitada. ¡Suscríbete ya!
Si ya eres suscriptor del impreso
actívate
* COP $900 / mes durante los dos primeros meses
Sabemos que te gusta estar siempre informado.
Crea una cuenta y podrás disfrutar de:
- Acceso a boletines con las mejores noticias de actualidad.
- Comentar las noticias que te interesan.
- Guardar tus artículos favoritos.
Crea una cuenta y podrás disfrutar nuestro contenido desde cualquier dispositivo.