Se necesitaron solo tres segundos para derrumbar el Edificio Bolívar, un inmueble que estuvo en litigio cinco años y que había impedido concluir la Plazoleta de la Caleñidad, una de las 21 megaobras de Cali.
A las 11:00 de la mañana del domingo, cerca de 300 curiosos se acercaron a la Plazoleta para presenciar la implosión de esta edificación de cinco pisos y que se llevó con ella el restaurante Los Turcos, el tertuliadero más famoso de la ciudad en las décadas del 70 y 80.
Ahora, en el sitio, solo queda en pie el Edificio de la Plazoleta de Avianca, otro inmueble que la Administración Municipal también quiere derrumbar.
“Ya está congelado, el año entrante esperamos poder tener los recursos para comprarlo. Esto va ser un gran parque, ya estuve mirando el anteproyecto que han hecho los holandeses. Quieren entrar en la plazoleta del CAM y del Concejo con una zona verde, tumbar el primer piso para integrarlo con el gran parque que se desarrollará”, dijo el alcalde Rodrigo Guerrero.
“Va a quedar muy bonito. La idea modificar todo este CAM, irnos al Paseo Bolívar, seguir por el Parque Uribe y llegar hasta la Clínica de los Remedios”, dijo el secretario de Infraestructura, Miguel Meléndez.
Para derrumbar el Edificio Bolívar se recurrió a 40 kilogramos de Emulid, explosivo parecido al Indugel. Lo ubicaron en vigas y cimientos y realizaron 400 perforaciones a 70 centímetros de profundidad.
Se utilizaron 200 detonadores y 1.500 metros de cordón, el que intentó detonar el Alcalde en tres oportunidades, pero, por seguridad, habían quitado la energía en el sector, mientras los espectadores presionaban, con su propia cuenta regresiva, para que se diera paso a la implosión.
La sirena sonó tres veces y de un momento a otro solo se escuchó un golpe seco, ensordecedor, angustiante y una nube de polvo envolvió 5.300 metros cuadrados a la redonda, no se podía respirar. El Edificio Bolívar ya era cosa del pasado.
Estaba desplomado y ahora, retirar los cerca de 10.000 metros cúbicos de escombros que dejó la implosión tomará de 35 a 40 días, según Gabriel Valencia, gerente técnico de Conalvías, firma que construye la Plazoleta de la Caleñidad.
“Las columnas fueron recubiertas para que el material no se dispersara. No hubo ningún peligro por la onda explosiva”, dijo Rogelio Gómez, de Demoliciones Atila.
Ya sin el Edifico Bolívar, seguirá ahora la construcción de dos sótanos para completar los 250 parqueaderos y una edificación de tres pisos para los restaurantes que están pendientes en la Plazoleta de la Caleñidad, trabajo que espera no tome más de seis meses.
REDACCIÓN CALI