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Bogotá, Barranquilla y Bucaramanga evitan la caída del empleo del país

Los nuevos empleos se concentran en esas tres ciudades. En el resto del país caen.

Redacción El Tiempo
El crecimiento del empleo en el país se concentró en los últimos meses en algunas ciudades, al punto de que sin los aportes de los nuevos empleos de Bogotá, Barranquilla o Bucaramanga, el número de puestos de trabajo en el país caería.
En el trimestre de febrero a abril, en Bogotá se generaron 92.360 empleos nuevos que compensaron la reducción de 40 mil empleos en el resto del país, de manera que en el total nacional se registró un crecimiento de 52.000 puestos de trabajo, de acuerdo con el Dane.
Las otras ciudades que muestran un crecimiento importante en el número de personas ocupadas son Barranquilla, con 30.000, y Bucaramanga, con 20.000. Tras ellas, con 14.000 nuevos empleos cada una, están Medellín e Ibagué. Este último caso es muy significativo, pues se trata de un número relativamente alto frente al tamaño de su población. Pero, aun así, el desempleo en la capital del Tolima sigue muy alto, y en el trimestre fue de 16,7 por ciento.
En Barranquilla, el desempleo fue de 8,4 por ciento en el trimestre; en la capital de la República, de 9,2 por ciento, y en Bucaramanga, de 10,5 por ciento. En todos los casos, por debajo del 10,7 por ciento en todo el país.
“Sin Bogotá el empleo nacional hubiera caído”, señala Ricardo Bonilla, secretario de Hacienda del Distrito, quien destaca el comportamiento de la industria en esta ciudad. Agrega que “el Dane solo saca datos industriales de producción de las empresas de más de 10 empleados, “es decir, no hay una medición sobre la microindustria que, en el caso de Bogotá, está generando encadenamientos. Aportó 12 mil empleos frente a los 250 mil empleos industriales que perdió el país”.
Otras ciudades con crecimiento en el empleo son Pasto, con 10 mil, y Manizales, con 7 mil. Frente a esos incrementos, están las caídas en Cartagena (3 mil); Montería (6 mil), Villavicencio (8 mil), Cúcuta (10 mil) y Pereira (11 mil).
Según el director del Observatorio laboral de la Universidad Externado de Colombia, Stéfano Farné, el panorama del mercado laboral no está rodeado de buenas noticias como parece. “En Chocó, por ejemplo, el desempleo es crónico. Baja la tasa nacional, lo que puede implicar que las personas se retiran del mercado laboral (dejan de buscar trabajo), porque el crecimiento del empleo es muy bajo. La economía está destruyendo puestos de trabajo. Si estos crecen a tasas tan bajas, se reduce la tasa de ocupación”.
En Bogotá, lo que más hizo repuntar el mercado laboral fue el sector de hoteles, restaurantes y comercio, donde aumentaron en 155 mil los ocupados. Esta tendencia se mantiene a nivel nacional, pues esta rama de la economía generó 333 mil empleos. En cambio, junto con la construcción, la agricultura fue la que más perdió (171 mil empleos) y, en este caso, Bogotá fue la que tuvo la mayor caída en el empleo del agro: 10 mil.
En cuanto a la construcción, en todo el país hubo una caída de 162.000 empleos, 76 mil de ellos en Bogotá, 12 mil en Medellín y 5 mil en Barranquilla, entre otras ciudades. Bonilla señala que “el problema no es solo en Bogotá; el trimestre así lo refleja. En el país se perdieron 162 mil puestos de trabajo en construcción. La construcción está en una fase declinatoria: inicialmente se sintió en la capital, pero ya se está reflejando en otras zonas”.
También baja el empleo público y, para Bogotá, la reducción fue de 5 mil puestos de trabajo. “Las entidades adelantan su proceso de formalización, pero no han ampliado las plantas”, agrega.
Mejoría en calidad
En indicadores de calidad, según el Dane, hay una mejoría nacional, teniendo en cuenta que se está formalizando el empleo. Solo en la capital hay 134 mil empleados particulares nuevos, mientras que los que laboraban por cuenta propia se redujeron en 36 mil. “Estos últimos, lo que hicieron fue irse a formalizar a otro lado”, dice Ricardo Bonilla, secretario de Hacienda.
Óscar Rodríguez, investigador del grupo de protección social del Centro de Investigaciones para el Desarrollo (CID), de la Universidad Nacional, señala: “Las cifras no acaban con la precariedad laboral, representada en el no acceso a la seguridad social y la reducción de los ingresos. Esto está acompañado de la extensión de la jornada de trabajo, lo que impacta la sicología de la persona. No es lo mismo un desempleo bajo en Colombia, con alta informalidad y trabajo de mala calidad, que el 24 por ciento de desempleo en España, donde la gente tiene protección social”.
Crece el empleo urbano
En el trimestre febrero-abril, la capital de la República puso el 52 por ciento de los nuevos empleos de los centros urbanos de todo el país.
Ese aporte es relativamente alto si se tiene en cuenta que en el total de empleos de las cabeceras, los de Bogotá equivalen al 25 por ciento.
En ese periodo, en las cabeceras municipales hubo 177.000 personas ocupadas más que en el mismo lapso del 2012.
De ese número, 92.000 fueron en Bogotá, cifra que supera a todo el resto de los centros urbanos, que llega a 85.000 empleos generados en el periodo.
De esta manera, hay lugares del resto del país donde se sienten con más intensidad la desaceleración y el menor dinamismo en la generación de puestos de trabajo.
El impulso al trabajo viene de los servicios
El hecho de que los grandes avances en empleo provengan de sectores como comercio, hoteles y restaurantes es congruente con la importancia que han venido ganando los servicios frente a un menor peso de la industria.
La industria hoy no es el sector más dinámico de la economía, subraya el investigador de la Universidad del Rosario Juan Carlos Guataquí, y, por lo tanto, no es el gran generador de empleo.
En cambio, la mayor dinámica en servicios no solo se nota en comercio, restaurantes y hoteles, sino en servicios inmobiliarios, telecomunicaciones y servicios financieros.
Así se nota en el crecimiento del empleo en el trimestre de febrero a abril calculado para las 13 grandes áreas metropolitanas. Sin embargo, Guataquí aboga por conocer lo que pasa con los servicios no solo fuera de Bogotá, sino también de esas 13 grandes áreas.
Redacción El Tiempo
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