Un Papá Noel y un muñeco de nieve gigantes dan la bienvenida, desde el tercer piso, a habitantes y visitantes que se aglomeran a presenciar la casa más iluminada de Santa Lucía: La Tienda de los Juanchos.
Embellecida por más de 15.000 bombillos multicolores, esta casa se ha convertido en el referente navideño entre los habitantes del barrio, que se reúnen para disfrutar de la época decembrina.
Cada diciembre, y desde hace 58 años, la casa, que también funciona como bar en el primer piso, ha sido engalanada con variados y creativos adornos navideños, dándole vida al barrio y llenando de orgullo a quienes habitan en este.
Así lo asevera Lía Peña, habitante del sector. “La gente se para asombrada para ver la casa tan linda, y hasta se toman fotos (…) esto es una belleza, está fuera de concurso”.
Y es ese cariño y ese orgullo de las personas lo que motiva a Humberto Rendón, uno de los dueños de la casa y quien cada año es el encargado de embellecerla.
Su familia, compuesta por 22 hermanos, siempre ha tenido un sentimiento especial para la Navidad, y se nota en el empeño que le pone a todas sus decoraciones. Tanto que se demoró un mes completo iluminando y decorando la casa. Tiene dos habitaciones exclusivamente para guardar las luces y las decoraciones navideñas.
“Yo soy feliz sabiendo que la gente es feliz y que le gusta la casa. No hay palabra que explique la gratitud que siento por ellos”, dice Humberto de manera humilde mientras a su lado se pone su inseparable amigo Higo, quien a pesar de tener discapacidad cognitiva, está siempre sonriente y disfruta del espectáculo de colores que ofrece el alumbrado.
Es tanta la devoción de Humberto por la Navidad, que se disfraza de Papá Noel para repartir regalos a los niños y hacer rifas a personas de escasos recursos económicos que viven en la zona. Y en sus rifas todos se llevan algo, nadie pierde.
El espíritu navideño de este sector en la parte baja de la comuna 13, se enaltece cada noche cuando las personas esperan ansiosas que se prenda el farol más brillante de su cuadra para decirle a la ciudad, ya llegó la navidad.
Santa Mónica brilla
Los vecinos de Santa Mónica también hacen gala de sus mejores alumbrados para hacer de la carrera 93 una de las más famosas del sector.
Caminando por esta iluminada calle se puede apreciar un alumbrado mágico, acompañado de adornos con movimiento, lo que hace más interactivo el recorrido.
“A nosotros no nos gusta irnos para ninguna parte, acá vienen las familias de cada casa y todo se llena de gente”, dicen los de la familia Correa Giraldo, que lleva 40 años viviendo allí.
Barrios como Campo Valdés y Villa del Socorro se unen a la tradición de los alumbrados, engalanando sus respectivas cuadras con mangueras de colores que recorren de un lado a otro la calle.
El espíritu navideño une a los vecinos en un ambiente de hermandad dando a entender que Medellín es mucho más que los alumbrados del Río.
DAVID ALEJANDRO MERCADO
PARA EL TIEMPO