"Si Dios me puso en este partido es porque me va a ir bien. Confío en él y tengo mucha tranquilidad". Así describió Daniel Torres la oportunidad que se le presenta, la de disputar la primera final de su carrera.
Ante la suspensión de Gerardo Bedoya, el caqueceño será titular en el mediocampo cardenal, situación que no asume como un peso sino "una bendición que hay que aprovechar".
Torres se siente a la par del 'General' y asegura que el antioqueño "aporta su experiencia", mientras él espera mostrar "todas las ganas del mundo para conseguir esta estrella, una ilusión no solo del grupo, sino de la hinchada".
Justamente, cree que la afición será decisiva para gritar campeón. "Estamos en casa, con el estadio a nuestro favor y esperemos aprovecharlo para ponerle la séptima estrella al escudo", apuntó.
Y por último, Torres soltó parte de la ansiedad que tiene al decir: "De solo imaginar El Campín lleno, se nos eriza la piel y hasta nos dan ganas de llorar porque es el partido de nuestras vidas y esperamos marcar historia".